3 '

El piloto de Cervera ha vuelto a subirse a lo más alto del podio 581 días después de su última victoria

Gran Premio de Valencia 2019, circuito de Cheste. Esa fue la última victoria de Marc Márquez, hasta el día de hoy. 581 días después, el seis veces campeón del mundo de MotoGP ha vuelto a la senda del triunfo en Sachsenring, su circuito talismán. Desde que llegara a la categoría reina en 2013, siempre ha ganado aquí, e incluso en categorías inferiores. Un logro tan solo equiparable al de Giacomo Agostini, que también consiguió ocho victorias consecutivas en un mismo circuito.

No obstante, lo más importante es que hoy ha vuelto esa sonrisa de campeón. Tras sufrir todo lo inimaginable y más a causa de su grave lesión que lo dejó sin competir toda la temporada pasada, hoy ha vuelto a ganar. Y sin limitaciones físicas. “El jueves ya avisé que sería el primer circuito donde no voy a notar tanto las limitaciones físicas, se ha notado. He podido pilotar toda la carrera al límite, sin tener que gestionar, si había algún error al haber pocas curvas a derechas el brazo reaccionaba, no se quedaba sin fuerza”, ha señalado Márquez.

El piloto de Honda perdía ayer su racha de poles en este circuito y avisaba de que hoy se terminaría su racha de victorias en el Gran Premio de Alemania. Pero, sorprendentemente, no ha sido así.

Hemos vuelto a ganar, no sé cómo. El fin de semana sí que he estado bien, pero no por delante del resto. Lo dije ayer, si se cuadra todo, se puede estar en el podio. No esperaba ganar, sabía que Miguel Oliveira estaba bien, pero cuando he visto cuatro gotitas, que Aleix (Espargaró) estaba detrás, digo ‘tengo tres vueltas paras arriesgar’. Ha sido difícil arriesgar porque vengo de tres ceros seguidos, una temporada que no he hecho nada. Es difícil arriesgar y saber tomar los riesgos. Cuando Miguel me estaba atrapando, gestionarlo y no ponerse nervioso… sobre todo las últimas vueltas la cabeza era un no parar”, ha explicado Marc.

Volver a pasar en primera posición la bandera de cuadros ha desatado un cúmulo de emociones en el piloto de Cervera. «Cuando he cruzado la línea de meta… (se emociona) lo hemos vuelto a hacer, eso que nos llevamos. Disfrutamos esta victoria de momento, sé que vendrá Holanda y volveremos un poquito a nuestra realidad, que no es estar en la victoria, pero espero que haya momentos de estos de aquí a final de año y poderlos aprovechar».

Tan solo Marc Márquez y el resto de su entorno tanto laboral como personal es consciente de lo que ha sufrido para poder llegar hasta aquí. Es por ello que, ha querido agradecer a todo el mundo que le ha ayudado. “Sobre todo a Honda, que me ha respetado muchísimo durante la lesión. A todos los médicos, empezando por Mir hasta el equipo del doctor Samuel Antuña, Carlos mi fisio que ha estado un año viviendo en mi casa, todo mi equipo, mi hermano… (se emociona), lo hemos hecho juntos, no solos. Ahora toca agradecer a todos, porque no se baja solo y no se sube solo”, ha apuntado.

En las dos últimas carreras nota que poco a poco vuelve el Marc de antes: «En lo personal valoras más lo que hacías, se daba por hecho que tenía que ser así, que se tenía que ganar y hacer podios. Si no ganabas una carrera era un desastre, si no estabas en el podio era una mala carrera. Este tiempo me ha valido para valorar estos momentos y otras cosas. Quiero volver a ser el Marc de antes, necesito tiempo, aunque ya en las últimas carreras, en Mugello y Montmeló, dije ‘he notado algo’, y aquí un poco más, pero sé que en Holanda no podemos esperar salir y ganar. Volveremos a luchar por entrar en la Q2, tocará sufrir. Con calma y poco a poco estaremos más cerca de los primeros».

Así, Marc Márquez ha contado una conversación que tuvo una conversación con Mick Doohan, cinco veces campeón del mundo de motociclismo, que fue clave para lo que ha sucedido hoy en Sachsenring.

«Cuando estás en una situación difícil buscas consolarte o expresarte con alguien que haya podido pasar tu situación. Alberto Puig me ayudó muchísimo, Alzamora también, pero tuve una llamada de casi media hora con Mick Doohan que me ayudó muchísimo, me explicó su caso 92-93, cómo se sentía, qué le pasaba, qué errores hacía, y parecía que estaba narrando mi situación, yo sólo escuchaba y no hablaba. Le dije que me explicara su situación y estaba narrando la mía, llegó con una moto que habían cambiado los otros pilotos, no entendía nada, la cambió y no entendía nada, errores estúpidos que no eran propios de él, yo también he hecho este año, pero él dice que es normal, que a él le pasó, que luego todo cambia y el tiempo lo arregla todo. Que necesitas paciencia y continuar trabajando. Esto te tranquiliza como piloto, porque ves que una leyenda como es Mick Doohan pasó por algo similar», ha concluido Marc.

Marc Marquez, Repsol Honda Team, Liqui Moly Motorrad Grand Prix Deutschland

Deja un comentario