La unión hizo la fuerza, mostrando al mundo un adelanto de la que puede ser la jugosa tónica del futuro WRC tanto en materia de organización como de protagonistas.
No fue solo cuestión de renovarse o morir, ya que los cuidados intensivos a los que se vio sometido el tradicional Rally de Alemania tras el asolamiento generado por la pandemia del COVID-19 terminaron enviándolo al delicado quirófano. Con todo ello, los ambiciosos cirujanos creyeron tanto en la vida que hasta consiguieron la insólita alianza de 3 países vecinos para que el paciente consiguiera no solo salvarse, sino convertirse en prueba viviente del éxito de una apuesta como ninguna otra en la historia del rally mundial. Así, el asfalto estaría de vuelta en el certamen absoluto a través de la fusión de Austria, República Checa y la nación germana mediante un rompecabezas logístico sin precedentes. Los 310 kilómetros al esprint repartidos en 18 tramos especiales quedarían incluso eclipsados por los sobresalientes 1380,69 km de enlaces por carretera abierta, descomunal cuantía que llevaría al convoy competitivo a atravesar fronteras y aunar aficiones en torno a un espectáculo único en su ya de por sí exótica especie.
Con asfalto y alquitrán para dar y regalar cobraría vida una edición inaugural llamada a resolver el impasse en torno al nombre y apellido de los portadores del título WRC 2023 de pilotos y copilotos. Elfyn Evans trataría de seguir aferrado a una épica cada vez más imposible ante el dominio de su compañero de equipo, un Kalle Rovanperä que se encontraba a un suspiro de abrazar su 2º campeonato mundial absoluto. Ambos partirían con ventaja al contar con la posibilidad de ensuciar el camino al resto de perseguidores a base de recortes que llevarían hojarasca, tierra y barro a la ruta a seguir. Esapekka Lappi fue de los que hizo alusión a este peligroso detalle del repentino deslizamiento, sabedor de que puede echar al traste toda la carrera en un instante. El finés de Hyundai, además, es uno de los inscritos llamados a andar con pies de plomo para asegurarse la plaza en 2024 dentro de un elenco de contendientes claramente marcado por la marcha de Ott Tänak a esta estructura surcoreana. El consiguiente bajón anímico de Ford M-Sport quedó acentuado por la ruptura de Pierre-Louis.Loubet y Nicolas Gilsoul, copiloto sustituido por un Benjamin Veillas con el que buscaría disfrutar del último baile en Europa para resarcirse de un bochornoso curso que lo situaba como farolillo rojo del pelotón Rally 1. Un apunte final más animado hablaría del retorno de Sébastien Ogier a este particular ruedo que, al término de su 5º día, conocería a sus primeros conquistadores de siempre.
Con todo ello, la impresionante ceremonia de salida en el centro de Praga quedó precedida por el Shakedown celebrado en el municipio alemán de Tittling durante la tarde del miércoles. En él, Thierry Neuville tiró de veteranía para sellar unas marcas que rebajaron los 2 minutos en todos y cada uno de sus 3 intentos, elevándose hasta lo más alto de la tabla con un primer registro 1,4 segundos más rápido que el mejor de Rovanperä y 1,5 sobre el de Tänak, quienes colorearon con generosidad el único podio oficialmente insignificante de la carrera.
Los focos y el regodeo al calor del público dejaron paso al clamor suscitado por las espectaculares superespeciales disputadas durante la tarde del jueves en suelo checo. La primera de ellas tuvo a Tänak como vencedor en el hipódromo de Chuchle, superando por la mínima a Ogier y Neuville. Seguidamente, la caída de la noche trajo consigo dudas sobre la elección de neumáticos con los que lanzarse al sinuoso circuito de Klatovy, optando in extremis el belga por unos compuestos blandos que lo ayudaron a recuperar el mando provisional de la carrera. Aun con ciertos problemas de visibilidad fue capaz de cerrar la jornada con 1,2 segundos sobre su homólogo de Ford y 5,8 frente al 8 veces campeón del mundo WRC, quien, a su vez, se situaba justo por delante de un Rovanperä que saboreaba el puntual traspié de Evans en forma de leve salida de pista. Los viejos fantasmas del galés en estos momentos de vida o muerte estaban al acecho una vez más.
La primera etapa hecha y derecha del rally empezó a fraguarse con la imperiosa ofensiva de Rovanperä, quien firmó un scratch inicial que lo situó de pronto a 1,4 segundos de Neuville. La confianza del belga se tambaleaba a causa tanto de nuevos problemas de visibilidad como de la presencia de suciedad deslizante en zonas donde no esperaba encontrarla, sembrando incómodas dudas en su gestión del itinerario. Para más inri, la lluvia estaba acaparando buena parte del protagonismo matinal de este viernes, obligando a los aspirantes a recurrir a unos neumáticos no tan resistentes frente a pinchazos, como bien pudo comprobar un Ogier que perdió más de 40 segundos por este percance al comienzo de la mañana. Sorprendentemente, su ya habitual crítica a Pirelli no se vio sucedida por una de sus tradicionales resurrecciones divinas. Nada más lejos de la realidad, ya que el galo, tras perder otros 41 segundos al término de la siguiente especial, declaró sentirse completamente falto de motivación. Mientras tanto, la cara de la moneda seguía teniendo el rostro de Rovanperä esculpido en su relieve. La firma del perfecto triplete de registros a batir le permitió cerrar la sección matutina con más de 29 segundos de renta sobre Evans, cauteloso ante las emergentes debacles ajenas. La más amarga de ellas puso a Lappi a merced de un desastre que pudo haber sido ciertamente trágico. El finés de Hyundai, cabalgando a menos de 2 segundos de Neuville, perdió la zaga en un giro rápido custodiado por árboles que, por supuesto, desencadenaron la colisión y las agresivas rotaciones. Aun así, el desenlace pudo ser mucho peor a tenor de unas grabaciones en las que se podía distinguir a temerarios espectadores situados en la zona donde impactó el bólido fuertemente. A escasísimos centímetros de distancia se quedaron las recomendaciones de seguridad de dejar de ser el “exagerado cuento chino” todavía considerado por muchos ignorantes.
La tarde permitió al jovencísimo líder seguir avanzando a pasos agigantados por méritos propios y dudas ajenas. Sin ir más lejos, Evans no consiguió encaramarse a un destello de sublime calidad que, tras elevarlo hasta el primer scratch del nuevo bucle, se esfumó sin dejar rastro, quedando el galés sumido en una neblina que incluso lo apartaría de la 2ª plaza provisional en favor de Neuville. El belga se agenciaría el último triunfo parcial puesto en juego durante una jornada administrada a la perfección por Rovanperä, quien no se arrugó ante estas acometidas rivales que muy difícilmente eran capaces de hacer algo contra los 4 scratch protagonizados por el vigente campeón mundial WRC, el cual ponía rumbo a la asistencia con más de 36 segundos de margen sobre Neuville.
La alternancia de posiciones de salida para afrontar la etapa del sábado trajo signos de calvario a lo que para unos pocos elegidos parecía ser una dulce peregrinación hacia Austria. La persistencia de las precipitaciones y su consiguiente efecto sobre el angosto asfalto provocó dolor de cabeza y sudores fríos en los principales espadas de Toyota. Una maniobra de frenada demasiado tardía dio con Rovanperä surcando una escapatoria embarrada que, pese a obligarlo a retroceder lentamente para reengancharse a la ruta, resultó ser milagrosa para prevenirlo de lo que hubiera sido una colisión segura. Quien no tuvo, ni mucho menos, tanta suerte fue Evans, candidato al título que terminó precipitándose contra un granero al no conseguir enmendar un letal azote de subviraje. El abandono de la dupla británica que previamente había cosechado el scratch inaugural de la jornada servía en bandeja de oro el cetro mundial a sus compañeros fineses, quienes estaban dispuestos a ver cómo se les escurría el liderato de la prueba con tal de salvar su montura hasta el final. Neuville no especuló ante estos signos de debilidad y cautela, lanzándose a lo más alto con un par de tiempos a batir que le permitieron llegar al parón del mediodía con 11 segundos de ventaja sobre Rovanperä y casi 1:20 minutos frente a Tänak, lejano guardián del Top 3.
La tarde supuso la restitución de un Ogier que había amenazado con perder el oremus al poco de comenzar el rally. La laureada leyenda gala aprovechó la oportunidad de resarcirse y recomponerse mediante una dupla de scratch que, sin embargo, no le permitió recortar prácticamente nada a Tänak, quien se las estaba teniendo con amenazadores problemas mecánicos y fallos de pilotaje al término de la jornada. Al mismo tiempo, Rovanperä, a más de 26 segundos de Neuville, demostró no saber fallar a su particular cita con el atrevido desparpajo que siempre lo caracteriza, adjudicándose el mejor tiempo absoluto del último arranque del día. Temible, acosadora, oscura, despiadada… y sí, sobre este último sector se cernió una noche que, ante todo, fue joven. Nunca mejor dicho.
Con todo ello, un domingo llamado a ser histórico echó a rodar en Alemania con la vistosa y poco relevante alternancia de registros a batir entre Evans y Ogier, agarrándose ambos a milagros cada vez más improbables. Rovanperä aseguraba sus cimientos con precaución al tiempo que Tänak, pese a llegar a sentir el aliento francés de Toyota a menos de 20 segundos de distancia, exprimía desde el último escalón del podio absoluto el escaso kilometraje que restaba hasta la meta final del fin de semana. Así, los puntos adicionales puestos en juego en la Power Stage cayeron en manos de Evans (5 tantos), Neuville (4), Ogier (3), T.Katsuta (2) y la dupla estonia de Ford (1).
Colorín colorado, la edición inaugural del Rally centroeuropeo se había acabado. Décadas de dilatada historia conduciendo hacia este exitoso alumbramiento es un hito que da fe acerca del ansia de vivir que manifiesta esta especialidad tan especial dentro del mundo del automovilismo. Neuville, cuya primera victoria de su vida en la élite intercontinental absoluta se consumó precisamente en Alemania 2014, se catapultó a lo más alto hasta conseguir hacer de su 19º triunfo en WRC el que lo convirtiera en el primer vencedor de siempre en estos lares trasfronterizos. Revalidar la gesta de Italia le permitiría, además, poner rumbo a Japón con una mínima desventaja de 7 puntos respecto a Evans en esta particular lucha por el preciado subcampeonato. Este asalto final de la temporada contaría también con el aliciente de un Tänak al que, aun con todas las odiseas vividas en este arduo curso, le quedaba todavía una mínima posibilidad de superar a ambos en suelo nipón gracias al podio cosechado en esta prueba europea. Mientras tanto, entre el belga y el estonio terminó situándose, por supuesto, Kalle Rovanperä, astuto y cauteloso hasta disfrutar por fin del momento de ser reconocido como bicampeón mundial WRC a sus 23 años recién cumplidos. Su 7ª ascensión al Top 3 y su undécimo Top 5 en 12 carreras disputadas en 2023 no podían dar otros frutos que no fueran los mejores.
La carambola de sucesos que acontecieron en el seno del pelotón Rally 2 también se saldó con alirón de un Andreas Mikkelsen que revalidó la corona mundial WRC2 de 2021 al término de un rally que había comenzado con el pie izquierdo. Salida de pista con rotura de suspensión, trompo posterior…y sí, un título caído en sus brazos tras cruzar la meta final consiguiendo el pleno de puntos extra del último tramo cronometrado. El traspié de G.Greensmith en este puntual arranque lo hizo precipitarse más allá del podio del grupo, empatando en la clasificación del campeonato con un laureado noruego que, sin embargo, había cosechado 1 victoria más que el británico en la presente temporada. Haber agotado el cupo de participaciones puntuables antes de Japón lo ataría de pies y manos en favor de Mikkelsen. Con todo ello, el Ford de A.Fourmaux resultó ser el Rally 2 más veloz, aunque su presencia ajena al WRC2 hizo que el triunfo de este particular grupo tuviera a su compatriota, N.Ciamin, como protagonista. E.Cais, por su parte, pudo saborear el podio ante su público checo al finalizar por detrás de los galos y por delante del veterano K.Kajetanowicz. El también checho F.Kohn hizo lo propio en una categoría WRC3 resuelta de antemano en favor del finés R.Korhonen, campeón mundial exento de sobreesfuerzos en Centro Europa y Japón gracias a su monopolio previo.
De esta forma pone rumbo la temporada a su ocaso en el país del sol naciente, sede de una clausura que deberá resolver tanto el esprint ligado a la última victoria del año como el maratón hacia un subcampeonato intercontinental que, visto lo visto, parece llamado a convertirse en el techo de cristal a alcanzar por todo aquel que no se llame Kalle Rovanperä. Del 16 al 19 de noviembre se atarán estos últimos cabos sueltos.
CONTROL HORARIO FIN DE RALLY (Opinión)
A Destacar: Una insólita obra arquitectónica confeccionada por un más que encomiable comité organizador terminó convertida en feudo de un veterano dispuesto a seguir dando buena guerra. Muy pocos hubieran podido vislumbrar la victoria oculta tras el velo de una desventaja superior a los 36 segundos con la que Neuville se fue a dormir al término del viernes. Sin embargo, y como suele ser habitual, el belga confió en su rol de opositor en gobiernos ajenos, recibiendo una vez más la merecida recompensa por ser en incontables ocasiones la alternativa directa que obliga a quienes alcanzan la gloria a ser gloriosos. Suya ha sido, es y será parte de este bálsamo divino. Eso sí, tanto él como prácticamente cualquier otro piloto pasado y presente están obligados a ver cómo el cielo es traído a la tierra por otra persona. Un superdotado yogurín finés que corre por donde otras leyendas caminaron es quien está al cargo de lo ansiado por cualquier aspirante al dar sus primeros pasos. No queda sino decir a este ilusionado aprendiz: “¿Sabes qué?, Él es dueño de tus sueños”.
A Tratar: Sumido entre los Rally 2 terminó el Ford Puma Rally 1 de Loubet, quien no disfrutó precisamente de una espléndida primera cita junto a Veillas. A la lacra estrictamente deportiva hubo que sumarle una penalización de 1 minuto y 1500 € por no llevar las prendas de seguridad correctamente ajustadas y abrochadas en un momento dado del itinerario. Su ya lejano título mundial WRC2 parece directamente de otra vida al contemplar un escabroso presente donde solo parecería jugar a favor de su continuidad en la élite el limitado margen de actuación de M-Sport. A su alrededor se encuentran G.Munster sumando kilómetros con creciente fiabilidad y Fourmaux, quien vuelve a llamar la atención de M.Wilson y R.Millener con triunfos y resultados bajo el brazo. Mientras tanto, en el garaje del vecino surcoreano también hay alguien inquieto frente al engañoso espejo. Lappi no parece encontrarse desde el podio en Estonia, sabedor de que la llegada de Tänak a la estructura de C.Abiteboul lo fuerza silenciosamente a dar el 120% de sí mismo para ganarse un nombre como piloto titular. Por último, quien llegó a parecer seriamente desconectado de la carrera fue todo un Ogier, sorprendentemente desilusionado al enfrentarse a una situación desfavorable que, visto lo visto, no era ni mucho menos decisiva en un fin de semana que lució su reverso tenebroso a pilotos como Evans, mudo ante la vital necesidad de dar el do de pecho.
Clasificación Final WRC Europa Central 2023
Pos. | Piloto | Copiloto | Coche | Tiempo | Dif. 1º |
---|---|---|---|---|---|
1 | T. Neuville | M. Wydaeghe | Hyundai i20 Rally 1 | 2:52:39.9 | |
2 | K. Rovanperä | J. Halttunen | Toyota Yaris Rally 1 | 2:53:37.5 | +57.6 |
3 | O. Tänak | M. Järveoja | Ford Puma Rally 1 | 2:54:32.7 | +1:52.8 |
4 | S. Ogier | V. Landais | Toyota Yaris Rally 1 | 2:54:48.5 | +2:08.6 |
5 | T. Katsuta | A. Johnston | Toyota Yaris Rally 1 | 2:55:28.2 | +2:48.3 |
6 | T. Suninen | M. Markkula | Hyundai i20 Rally 1 | 2:55:46.2 | +3:06.3 |
7 | G. Munster | L. Louka | Ford Puma Rally 1 | 2:57:02.2 | +4:22.3 |
8 | A. Fourmaux | A. Coria | Ford Fiesta R-2 MKII | 3:04:15.7 | +11:35.8 |
9 | N. Ciamin | Y. Roche | Skoda Fabia RS R-2 | 3:04:33.0 | +11:53.1 |
10 | P.L.Loubet | B. Veillas | Ford Puma Rally 1 | 3:04:44.2 | +12:04.3 |
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