El jefe de Honda en la Fórmula 1 afirma que no habrían conseguido el éxito con McLaren que si han obtenido gracias a su colaboración con Red Bull después de ganar el mundial de pilotos con Max Verstappen
Honda volvió a la Fórmula 1 en 2015 con McLaren después de retirarse a finales de 2008 y vender su equipo a Ross Brawn. El famoso ingeniero de Fórmula 1 consiguió que aquel equipo ganara sin apenas presupuesto el mundial de pilotos con Jenson Button y el de constructores en 2009.
Tras aquella exitosa temporada, la escudería fue vendida a Mercedes. Los alemanes no ganarían ningún mundial desde 2010 hasta 2014, cuando comenzó la era híbrida en la Fórmula 1 que les ha hecho ganar ocho mundiales de constructores seguidos y siete de pilotos.
Y es que el último mundial de pilotos fue para Max Verstappen, que culminaba así una magnífica temporada con Red Bull Racing Honda, devolviendo a los japoneses a lo más alto de la Fórmula 1 después de su maravillosa etapa como McLaren Honda en los años 90.
Pero su segunda etapa, que comenzó en 2015, fue un fracaso y la relación duró apenas tres años tras sufrir enormes problemas de fiabilidad, en un motor que estaba por detrás del resto de sus rivales. Los japoneses comenzaron una nueva etapa en 2018 con Toro Rosso.
El segundo equipo de Red Bull permitió a los austriacos analizar si el motor de Honda merecía la pena cambiar de proveedor de motores. La conclusión fue evidente y Red Bull comenzó una relación exitosa con los japoneses, que seguirá a pesar de la retirada de Honda de la Fórmula 1.
La duda que surge es si podrían haber alcanzado este mismo éxito con McLaren en el caso de que hubieran seguido juntos. Pero para el director de Honda, Masashi Yamamoto, no hay ninguna duda de que no hubiera sido así como comentó en una entrevista con The Race.
«Incluso si hubiéramos continuado con el proyecto de McLaren, no creo que hubiéramos podido tener éxito, ni McLaren tampoco«, comentaba el japonés, pues consideraba que necesitaban cambiar de aires.
Y es que el jefe de Honda cree que el daño con McLaren era totalmente irreparable, además de que con Red Bull y Toro Rosso se entendieron adecuadamente desde el comienzo de la relación: «Fue un reinicio y lo necesitábamos«, concluyó Masashi Yamamoto, consciente de que alcanzaron el título mundial gracias al cambio.
