El asesor de la escudería austriaca analizó el día de hoy, afirmando que ve que el porpoising de Ferrari en el día de hoy puede ser un problema para sus rivales, además de analizar los problemas de Red Bull en el último sector de Albert Park
La primera práctica del Gran Premio de Australia suponía volver a rodar en el clásico trazado de Albert Park. El circuito ha sido renovado quitando una chicane y cambiando el ancho y ángulo de algunas curvas, aumentando la velocidad media.
Pero desde que se disputó la última carrera en 2019, la situación en la parrilla ha sufrido algunos cambios. Por aquel entonces, Mercedes dominaba mientras Ferrari y Red Bull trataban de recortar distancias y acercarse a la zona alta de la parrilla.
Ahora la situación es la inversa debido al cambio de normativa de 2022, los italianos y austriacos son los equipos que luchan por el mundial, mientras los alemanes tienen problemas y tratan de volver a la zona en la que han estado estos años.
Hoy fue la Scuderia quien impresionó con un Sainz muy rápido en los primeros entrenamientos libres respecto al resto, con Leclerc segundo y Pérez tercero, ambos a más de cinco décimas. En la segunda sesión fue el monegasco el más rápido pero Verstappen se coló segundo a poco más de dos décimas del piloto de Ferrari.
Pero lo llamativo fue que los dos pilotos de la escudería italiana sufrieron de manera notable el famoso porpoising que ha aparecido con estos nuevos coches. Y este molesto inconveniente ha provocado que el asesor de Red Bull, Helmut Marko, espera que suponga un problema para los de Maranello como recogieron desde Auto, Motor und Sport: «No pueden hacer una distancia de carrera así. Ni los pilotos ni los coches«.
Esto fue algo que el piloto de Ferrari, Charles Leclerc confirmó al propio medio alemán, ya que parece que es un problema más intenso en este trazado de Albert Park respecto a otros: «Todavía tenemos que trabajar para tenerlo bajo control», dijo el monegasco.
El asesor austriaco sigue creyendo en las posibilidades de sus dos pilotos a pesar del gran ritmo mostrado por la Scuderia y la falta de velocidad en el último sector del circuito australiano, explicando las diferencias que han tenido en la pista real frente al simulador.
«En los primeros entrenamientos probamos algo que funcionó en el simulador, pero lamentablemente no en la pista. Cuando volvimos a la configuración conocida con más carga aerodinámica, fue mejor. Nos sigue faltando algo de tracción en las curvas lentas, pero aun así pudimos seguir el ritmo de Leclerc a largo plazo», concluyó Helmut Marko.
