El piloto del Pramac ha vuelto hoy a pilotar una MotoGP tras un mes y medio de baja a causa de una grave lesión
Jorge Martín ha vuelto hoy a conducir una MotoGP tras algo más de mes y medio de ausencia. Una gran noticia, ya que el madrileño no se hacía ver por el ‘paddock’ desde que sufrió una grave lesión tras una caída en el FP3 de Portimao. Así, Martín ha querido destacar que las sensaciones han sido muy buenas, aunque recalca que “en cuanto vea que se me va de las manos, será preferible parar y recuperar para la siguiente carrera”.
El piloto español ha sido duodécimo en la primera sesión de entrenamientos, mientras que en la segunda acabó con el peor tiempo, ya que cuando iba a hacer su vuelta rápida tuvo un susto que casi acaba en highside. “En la FP2 he intentado trabajar un poco el ritmo, la goma media y no estaba tan lejos de ritmo”, explica Martín, quien avanza que le será muy difícil poder acabar la carrera.
“Hoy lo máximo que he podido dar han sido 7 vueltas porque después de unas pocas vueltas ya noto que no estoy al cien por cien. Entonces, intentaré sufrir un poco, pero está claro se va a hacer dura la carrera, aunque intentaremos acabar”, ha explicado Martín.
Volver a subirse a una MotoGP tras más de un mes sin pilotarla no es cosa fácil. Es por ello que se tiene que saber valorar el esfuerzo que hacen los pilotos de esta categoría cuando se suben a estos prototipos. “Volver aquí es increíble. Hoy en la FP1 casi me han entrado ganas de llorar porque poder hacer una vuelta detrás de Márquez por ejemplo y poder aguantar ese ritmo, es algo increíble después de tanto tiempo parado”.
Sin embargo, admite que se está tomando este regreso más como un entreno que como una carrera. Por lo que, será más importante para el piloto en este Gran Premio el hecho de ir cogiendo experiencia para poder recobrar las sensaciones cuanto antes. “Este es un deporte en el que la pasión puede con todo, y entonces las ganas de volver son las que provocan un poco todo esto”, ha concluido Martín.
