El piloto mexicano comentó varios detalles de su vida entre ellos que no tuvo un modelo de persona famoso en el que fijarse y que Madrid es la ciudad que elige para vivir
Red Bull tiene esta temporada a Checo Pérez como piloto y para algunos aficionados del equipo austriaco han decidido hacer una entrevista para que puedan conocer más sobre el piloto mexicano.
Y es que a pesar de que Checo lleva diez años en la Formula 1 pequeños detalles sobre su vida son completamente desconocidos y uno de ellos es que le gusta mirar el mercado de acciones todas las mañanas porque para él muestran que lo importante no es donde estás sino donde acabas, como las carreras.
«Me gusta mucho mirar la bolsa e incluso tengo algunas acciones también. Si lo miras cada día pasas por muchas emociones, un día es muy bueno, un día es muy malo, y es como con las carreras, no importa lo que hagas, es donde acabes. En general me gusta mucho y en general creo que es bueno invertir», comentaba Checo.
Para Pérez, la capital de España, Madrid, es la ciudad donde le gustaría vivir si le dejaran elegir cualquier sitio, aunque volvería a su Guadalajara natal por un tiempo cuando acabe su vida dentro de la Fórmula 1.
«Si pudiera vivir en cualquier sitio, sería en Madrid. Me gusta mucho, la cultura española es muy parecida a la mía en México. Algún día, cuando la F1 haya terminado para mí, creo que primero volveríamos a casa, a Guadalajara, por un tiempo.»
«Mi mujer también es de allí, así que volveríamos por lo menos una temporada. Pero creo que pasaríamos tiempo entre ambos», añadía Pérez, dejando ver que le gustaría vivir en ambos lugares.
También Checo comentó que si no se hubiera dedicado a la Fórmula 1, habría sido banquero o abogado: «Me gustaría haber sido banquero o abogado. Ambos tienen mucha adrenalina, similar a la de la bolsa, y eso es lo que diría que se parece a las carreras.»
Una de las preguntas más interesantes fue sobre el modelo a seguir que tuvo, ya que muchos deportistas han tenido un ídolo que les ha guiado en su trayectoria, pero Checo es más sencillo: «Realmente no tuve un modelo a seguir, sólo admiraba a la gente que tiene éxito en su trabajo y en su vida privada».
Finalmente, el mexicano comentó que viaja a las carreras con lo imprescindible:
«Cuando voy a una carrera sólo llevo mi pasaporte y mi teléfono. Antes tenía un entrenador que me decía: ‘cartera, teléfono, pasaporte y el resto a la mierda’. Mientras tenga eso, estoy bien».
