Joan Mir no esta teniendo el mejor comienzo de temporada posible. El de Palma de Mallorca ya tiene dos ceros en su casillero
El joven piloto de Suzuki esta teniendo serios problemas este año para cumplir aquello que se propuso al comienzo de este 2020. Subir el nivel y estar en el mismo escalón que su compañero de equipo, Alex Rins.
Para la desgracia del #36, tuvo que ver y sentir como Iker Lecuona se lo llevaba puesto en los primeros compases de la carrera de Brno. Nuevamente Joan Mir acumula un 0 en su casillero, aunque en esta ocasión no fue por un error suyo, no así como ya sucedió en la primera carrera de Jerez, que se fue al suelo por sus propios medios.
A pesar de esto, el Ballear acumula 11 puntos, ya que finalizó en 6º posición en el segundo fin de semana de Jerez.
“Estos dos ceros que hemos acumulado en las tres primeras carreras no pueden volver a pasar. Ya lo hemos hecho y solo espero a final de temporada poder decir que son solo un recuerdo, y que estamos ahí”.
Desde que Joan Mir llegó al mundial deslumbro a extraños y conocidos, ya que dejaba una sensación de piloto muy maduro encima de la moto a pesar de su corta edad. El #36 consiguió proclamarse campeón del mundo de Moto3 en 2017 de forma muy abrumadora, por lo que estaba llamado a ser un piloto referente en el cambió generacional de pilotos.
Su corto paso por Moto2 no dejó unas grandes sensaciones y su llegada a MotoGP no fue de las mejores, ya que estuvo gran parte de la temporada lesionado. Joan Mir vuelve a compartir pista y categoría con pilotos que el ya gano en el pasado, bien sea el caso de Fabio Quartararo o Brad Binder, pero en esta ocasión los papeles se han invertido.
“Es buena noticia que ganen rivales nuestros de siempre, quiere decir que el nivel lo hemos tenido y lo seguimos teniendo, pero sí crea una ansiedad o unos nervios de más, porque ves que esta gente lo puede conseguir y yo también debería. Mi equipo también lo sabe y hay que ponerlo todo junto, creo mucho en el potencial que tenemos. Estoy bastante tranquilo, vemos en el nivel que estamos en los entrenamientos, solo nos falta la Q2 y en carrera acabar y demostrar ese potencial que tenemos. En la ultima carrera, por tomarlo con calma al principio, nos tiraron. Son errores de lo que hay que aprender. Lo importante es estar ahí y, sobre todo, no hacer más ceros”.
El cambio generacional ya es una realidad. A pesar de la ausencia de Marc Márquez en las dos últimas carreras, se ha podido apreciar como dos de los últimos pilotos en subir a la categoría han ganado todas las carreras que se han disputado.
“Es una generación jóvenes que suben con fuerza. En las categorías pequeñas se crea como un filtro con los pilotos que deben de estar en MotoGP, y estamos viendo que pilotos con los que hemos estado luchando desde siempre, como Fabio, Binder o Bagnaia, incluso Oliveira, están ahí, así que ahora empieza a llegar nuestra hora en MotoGP. Llevamos dos años, en nuestro caso, y tenemos que aprovechar la experiencia que tenemos”, zanja el #36.
