Con este nuevo título mundial, España ha conseguido más de 20 mundiales en la última década
El pasado domingo, Joan Mir hizo historia tras proclamarse campeón del mundo de MotoGP en su segundo año en la categoría reina. Con este título, ya son 53 los títulos del Mundial de Motociclismo que ha conseguido España desde la creación del campeonato en el año 1949, cosa que continúa consolidando a nuestro país como el segundo con más títulos, tan solo por detrás de Italia, que suma un total de 78.
Desde 2010, España ha sumado un total de 20 títulos mundiales (sin contar el de Mir) de 30 posibles entre las tres categorías que componen el Mundial de Motociclismo. 9 en MotoGP, 5 en Moto2, 4 en Moto3 y 2 en la extinta categoría de 125cc. Unos datos impresionantes que demuestran el dominio demoledor de nuestro país durante esta última década. Y esto no es ninguna casualidad. Muchos son los factores que han determinado estos éxitos y uno de ellos son las escuelas de motociclismo, entre las que destaca la escuela de Chicho Lorenzo (padre de Jorge Lorenzo) y la Cuna de Campeones, en el Circuit Ricardo Tormo de Cheste (Valencia).
El papel de las escuelas de competición
Escuelas como las mencionadas anteriormente se han convertido en un pilar fundamental en cuanto a la promoción de jóvenes talentos, y es que son en gran parte responsables del éxito actual del motociclismo en nuestro país.
La Cuna de Campeones ha significado, desde su creación en 1999 junto al Circuit Ricardo Tormo, un aumento de la cantidad de pilotos españoles y, en este caso, sobre todo valencianos, en el Mundial de Motociclismo. Con Julián Miralles, director de la escuela, como referente empezaron pilotos como Héctor Barberá, Xavi Forés o Nico Terol, campeón del mundo de 125cc en el año 2011. Así, poco más de 20 años después, Joan Mir se ha convertido en el primer piloto de la Cuna de Campeones en proclamarse campeón del mundo de MotoGP, pues formó parte de la escuela valenciana durante 2 temporadas.
Actualmente, la Cuna de Campeones sigue gozando de muy buena salud y ha formado también a pilotos internacionales, como al checo Filip Salac.
Otro de los pilotos que también pasó por esta escuela y se encuentra en el Mundial es el valenciano Héctor Garzó, en la categoría de Moto2. El de Paterna, afirmó en una entrevista que no tiene ninguna duda de que “la Cuna de Campeones y Julián Miralles han sido una gran parte de mi aprendizaje y de mi trayectoria hacia el día de hoy. Es un certamen bastante importante para cualquier piloto”.
La histórica afición al motociclismo
Nuestro país se ha caracterizado siempre por una cultura alrededor del mundo del motor bastante característica y muy distinta a otros países. De ahí se explica la gran cantidad de circuitos que hay en toda la península, que han supuesto parte fundamental de la celebración de grandes pruebas a nivel mundial, y no solo de motociclismo.
Por tanto, la gran cantidad de circuitos existentes en nuestro país ha permitido no tan solo mantener una gran afición, sino también la promoción de nuevas promesas que, a través de esa pasión por el motociclismo, ya son realidades. España es, hoy en día, el país referente de este deporte, y no tan solo por el Mundial de Motociclismo, sino también por otras categorías no tan conocidas, pero en las que hay mucha presencia española.
Talento de presente y futuro
Es muy probable que sigamos viendo, durante varios años más, la misma cantidad de pilotos españoles luchando por títulos mundiales. Hay mucha cantera y de mucho talento, con pilotos que dentro de poco lucharán por consolidar una nueva generación ganadora como Pedro Acosta, Ivan Ortolá, David Alonso o Izan Guevara, entre muchos otros.
24 pilotos españoles compiten esta temporada 2020, a punto de acabar, entre las tres categorías. Algunos se irán este año, como es el caso de Tito Rabat, mientras que otros entrarán, como Xavi Artigas o Pedro Acosta. Nunca se sabe que pasará en el futuro, pero teniendo esta base de pilotos tan sólida, es muy probable que los pilotos españoles sigan cosechando grandes éxitos en el futuro.
