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Leclerc terminó en octava posición en el GP número 1000 para la Scuderia, el GP de la Toscana. Las expectativas estaban altas tras la quinta plaza obtenida en la clasificación del sábado.

Nuevo GP para Ferrari, y esta vez aún más especial, y otra decepción. Y más grande debido a las circunstancias: su carrera número 1000, en su tierra, y fans suyos que han asistido.

Charles Leclerc, que ayer mismo brilló consiguiendo un quinto lugar que sabía a gloria, ha finalizado hoy en un decepcionante octavo lugar. Y un octavo lugar que se puede coger con pinzas, ya que se ha visto favorecido por la sanción a Kimi Räikkönen, obteniendo así 3 puntos para el casillero. Ayer, el monegasco pudo brillar; hoy en cambio, estaba fustrado.

«Ha sido una de esas carreras donde el factor mental ha estado ahí, quizás de las más duras últimamente. He salido una buena salida, pudiendo adelantar a un par de coches y defenderme de los primeros ataques, hasta que se habilitó el DRS. Hice todo lo que estaba en mi mano. Sin embargo, me voy con un sentimiento encontrado, ya que el comportamiento del coche ayer era bastante positivo, siendo objetivos en donde nos encontramos ahora».

«Ha sido similar a Monza. Luché contra los coches de arriba, sin embargo al cabo de unas vueltas, no podía seguir el ritmo de ellos. Tenemos que averiguar qué problema es, y solucionarlo cuanto antes. Sé que no es fácil, y tenemos a la fábrica trabajando duro. Es una situación complicada, pero sé que saldremos de ésta, así que me mantengo positivo. No veo la hora de llegar  Soschi y montarme de nuevo en el coche».

Sin embargo, en las declaraciones post-carrera, el monegasco ha confesado que desde Ferrari preparan novedades de cara a la siguientes carreras, aunque está aún en el aire cuándo llegarán éstas.

«Sé que el equipo está tratando de traer actualizaciones, y éstas llegarán en las próximas semanas. Nos encantaría que llegaran antes las actualizaciones, pero primero hay que averiguar qué está mal para actualizar el coche. Seamos pacientes que pronto llegarán».

Lo único que tiene Ferrari para celebrar de este GP de la Toscana, ha sido su quinto puesto en la clasificación del sábado. Sin embargo, el propio Leclerc ha reconocido que por muy arriba que se clasifique el sábado, los puntos son el domingo.

«La vuelta del sábado fue un impulso para el equipo; acabamos en buena posición y el equipo estaba ilusionado para la carrera. Les estoy agradecido por el balance que me consiguieron, pero hay que ser realistas, y saber que los puntos se reparten el domingo. Por tanto, analizando la carrera, hay poco de positivo; sin embargo, el equipo tiene que ser positivo y no rendirse. Pasaremos este momento difícil más pronto que tarde».

Charles Leclerc

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