Hablando con su ex-compañero de equipo Ben Spies, Jorge Lorenzo explica sus ambiciones como piloto probador de Yamaha y recuerda su última lucha por el título en 2015
En 2011 y 2012 fueron compañeros de equipo de MotoGP en Yamaha. Ahora Jorge Lorenzo y Ben Spies se reunieron, aunque sólo virtualmente, para charlar sobre los viejos tiempos. Como es debido, también se habló del nuevo papel de Lorenzo como piloto de pruebas y de su wild card programado para el Gran Premio de Cataluña.
Se suponía que iba a tener lugar este fin de semana, pero tuvo que ser pospuesta indefinidamente debido al COVID-19. La crisis también ha significado que no habrá carreras con wild card en 2020. Así que el regreso de Lorenzo a las carreras tendrá que esperar.
Sin embargo, el español se lo está tomando con calma al hablar con Spies y el reportero de MotoGP Matt Birt. «Para ser honesto, no tomé la decisión de correr en Barcelona para probarme como piloto o para entender o sentir si podía correr de nuevo», aclara Lorenzo.
Ben Spies quiere el regreso de Jorge Lorenzo
Sin embargo, los rumores sobre su regreso persisten y son encendidos por el propio Lorenzo cuando admite que podría imaginar un regreso permanente al equipo correcto con la perspectiva de ganar carreras y el título.
«Desde el momento en que termino este capítulo de mi vida, no siento la necesidad ni la voluntad de volver, pero añade que nunca se sabe realmente lo que va a pasar en la vida. Así que esta puerta aún no está completamente cerrada», continuaba Jorge Lorenzo.
«No es como si no fueras rápido allí», dice hacia su antiguo compañero de equipo de MotoGP, delirando: «Habría sido genial ver a Jorge corriendo de nuevo», añadía Ben Spies.
El mundial con Yamaha en 2015 fue el «más difícil»
Verle rodar en Sepang por primera vez tras 4 años fuera de Yamaha, parecía que había llegado a casa. «Como de 2011 a 2015», recuerda Spies.
«Habría sido divertido verlo, pero tal vez el año que viene».
De cualquier manera, Lorenzo no quiere forzar nada. «Elegí este trabajo como un hobby», enfatiza.
«Porque me gusta la moto y creo que es una buena oportunidad para seguir pilotando la moto y al mismo tiempo dar algo a la marca que me ayudó a entrar en MotoGP y me hizo ganar tres títulos del mundo».
El último de ellos se remonta a 2015, cuando Lorenzo rompió la racha de victorias de Marc Márquez y aseguró su quinto título en total. Mirando hacia atrás, Lorenzo lo describe como el «más duro» de todos, «aunque sientes mucha presión en el primer título porque nunca lo has ganado antes».
Lorenzo recuerda el camino hacia el último título
En comparación con 2010, cuando Lorenzo tenía «una clara ventaja sobre Pedrosa» y ganó el duelo por el título frente al piloto de Honda, 2015 fue «una historia diferente» y mucho más dura, como recuerda el español.
«Ya en Qatar, Valentino ganó la carrera y yo era cuarto, así que estaba detrás de él en el campeonato. Durante 17 carreras fui segundo detrás de él e intenté alcanzarlo. A veces pensaba que ganar el campeonato era inalcanzable, por ejemplo cuando me lesionaba los ligamentos en los entrenamientos».
Lorenzo volvió a Motegi, el cuarto último gran premio de la temporada. «Estaba liderando la carrera al principio y pensé que podía ganar, pero terminé tercero. Y Valentino terminó antes que yo. Así que estaba muy atrasado en los puntos». Pero entonces el llamado Sepang Clash ocurrió entre Rossi y Márquez.
Rossi tuvo que empezar desde la última posición de la parrilla en Valencia debido a una penalización. Esto le dio a Lorenzo la oportunidad de ganar su quinto y último título.
Yamaha también ha estado sin título desde entonces. Pero con su trabajo como piloto de pruebas, Lorenzo quiere contribuir a que esto vuelva a suceder. Todavía no está claro cuándo y dónde tendrá la oportunidad de hacerlo en la comprimida temporada de MotoGP del 2020. Él y Yamaha están actualmente planeando más test.
