Caballero del Imperio Britanico, Comandante de la Orden del Imperio Britanico, Caballero de la Legion Extranjera y fundador de Williams Grand Prix Engineering
Hijo de un oficial de la Real Fuerza Aérea y una maestra de escuela de donde le viene esa disciplina que lo llevo a crear una de las escuderías mas exitosas en la Fórmula Uno.
Aventurero que arriesgó todo por lograr su sueño se inicio en el automovilismo como mecánico y piloto hasta que en el año de 1966 creó Frank Williams Racing Cars con un Brabham que compró y que le condujo Piers Courage financiado con los ingresos de su trabajo como vendedor ambulante de abarrotes.
Muchos problemas económicos en sus inicios al grado de llegar durante una época a conducir sus comunicaciones en teléfonos públicos y ahorrando en cada rubro para poder correr en la Fórmula 2 y 3 hasta que la presión lo llevó a asociarse con un magnate petrolero canadiense, Walter Wolf, perdiendo el control y propiedad del equipo.
Hasta que en el año de 1977 se separó y, junto con Patrick Head fundó la escudería que le diera sus mas grandes logros. Entre otros grandes de la categoría trabajó en conjunto con un joven diseñador que le dio un fuerte impulso a sus autos con los conceptos de aerodinámica y diseño revolucionarios que tenia, el señor Adrian Newey.
Siete fueron los pilotos que obtuvieron un campeonato a bordo de sus autos: Alan Jones, Kekee Rosberg, Nelson Piquet, Damon Hill, Jaques Villeneuve, Nigel Mansell y el profesor, Alain Prost y también obtuvo nueve campeonatos de constructores.
Habiendo quedado cuadrapléjico como consecuencia de un accidente automovilístico cuando retornaba de el circuito Paul Ricard después de unas pruebas con sus autos en el año de 1986 siguió al frente de su equipo con la misma mentalidad ganadora convirtiéndose en ejemplo de vida para muchos.
Grandes nombres pasaron por su garaje y fue, probablemente uno de los últimos grandes dueños de equipo en la categoría, de esos que se subían las mangas de la camisa y le metían mano a sus propios autos, fin de un gigante del automovilismo, inicio de una leyenda que perdurara en nuestros recuerdos y en los libros de historia de la Fórmula Uno.
Descanse en Paz Sir Frank y, muchísimas gracias por las glorias compartidas, la Formula Uno y sus aficionados nunca te olvidaremos.
