El director del equipo Red Bull bromeó con la intención de no mostrar ninguna preocupación por el ajuste de la FIA sobre la altura del fondo plano
La FIA ha dado a conocer este mes la noticia de que los equipos de Fórmula 1 se enfrentarán a nuevas normas para evitar problemas ‘porpoising’.
Algunas de ellas se aplicaron ya en Bélgica, mientras que el resto se será al inicio de la próxima temporada y Christian Horner intenta no preocuparse.
La nueva normativa de este año ha hecho que los equipos tengan que enfrentarse de repente al fenómeno del porpoising.
Mientras que Mercedes y Ferrari, entre otros, siguieron sufriendo el problema, Red Bull consiguió solucionarlo rápidamente.
Las escuderías que seguían teniendo problemas se dirigieron entonces a la FIA y plantearon la cuestión de la seguridad, lo que dio lugar a semanas de investigaciones y debates.
Finalmente, la organización llegó a la conclusión de que debía intervenir para evitar males mayores.
Una de las cosas que tendrán que hacer las formaciones la próxima temporada es aumentar la altura del suelo. Mientras que la FIA aspiraba a 25 milímetros, la cifra se quedó en 15 milímetros.
Horner trata de mantener la calma en estas circunstancias con humor:
«Mi mujer me dice a menudo que el tamaño no importa, así que no me voy a preocupar demasiado por los 10 milímetros», dijo entre risas al periodista de Fórmula 1 Adam Cooper.
