Acaba de escribirse la primera página en la historia de Qatar dentro de la Fórmula 1. Para mí, una carrera muy entretenida y, pese a lo que se preveía, con muchos adelantamientos.
Pues llegó el día para Qatar de debutar en la Fórmula 1. Entrábamos en terreno desconocido, lo cual hacía todavía más interesante la elección de una estrategia. Las pinchaduras fueron un verdadero dolor de cabeza, la más dolorosa, sin duda, la de Bottas, por lo que representa en la lucha contra Red Bull ya entrando en la recta final de la temporada. Y justamente, en el lado contrario, encontramos a Red Bull, que fue a lo seguro y amarró puntos valiosísimos. ¿Acertaron, erraron?… Creo que estuvieron en lo correcto, fueron a lo seguro. Pero, vayamos por partes.
El domingo inició con los anuncios de las penalizaciones para Bottas (tres lugares) y Verstappen (5 lugares) por no respetar las banderas amarillas al final de la Q3. Sainz no tuvo penalización. Con esto, Bottas salía de la quinta posición y Max desde la séptima. Una salida con muchos movimientos, pero limpia afortunadamente. Alonso ganó una posición, tres Verstappen y Ocon, dos Checo y Stroll y cuatro los coequiperos Kimi y Giovinazzi, sin olvidar a Mick, claro, que también ganó una. Entre los que perdieron posiciones encontramos a Latifi, Gasly, Norris, Sainz y Ricciardo; Vettel fue el más desafortunado retrocediendo siete posiciones. Y, por supuesto, Bottas, que iniciaba mal una carrera que a la postre sería para el olvido, perdiendo cinco posiciones. Aunque, como sabemos, lo peor vendría después.
Alpha Tauri y McLaren con una carrera sin mucho para recordar, sólo Norris logró rescatar dos puntos. Aston Martin con Stroll en la sexta posición y Vettel que logró meterse en la décima, no salió tan mal librado. Ferrari, parecía que hubiera podido lograr un poquito más, aun así, séptimo y octavo, para Sainz y Leclerc respectivamente, los hacen irse, creo, relativamente tranquilos de Qatar. Alpine, con Alonso en tercero y Ocon en quinto, tuvo un gran día. Ya volveremos con Alonso más adelante…
Mercedes, la agonía y el éxtasis. Sufrió el abandono de Bottas y celebró el triunfo de Hamilton. Dejan Qatar con un sabor de boca agridulce pues sumar con un solo auto puede resultar costoso para sus aspiraciones en el campeonato de constructores, aunque en el de pilotos lograron recortarle seis puntos a Max. Sí, solo seis, pues Max se quedó con el segundo lugar más el punto por vuelta rápida. En Qatar, Hamilton no tuvo competencia, a pesar de la gran carrera que hizo Max, nunca pudo ponerle presión. En cuanto a Bottas, qué decir. Tal vez, el fresco recuerdo de la carrera en Brasil en la que el mismo piloto declaró que una estrategia a una sola parada hubiera sido suficiente, le jugó en contra. Demasiado optimismo ante una pista desconocida y con un piloto que no es de los mejores conservando neumáticos. Se arriesgaron y no resultó. Y es aquí en donde la discreta y cuestionada, por algunos, estrategia de Red Bull toma toda su dimensión.
Para hablar de Red Bull quisiera regresar un poquito en el campeonato, al 6 de junio para ser exactos. ¿Lo recuerdan? A solo unas vueltas de que cayera la bandera a cuadros, todo parecía indicar que, en Bakú, Red Bull haría el uno-dos. Pero, justamente, una pinchadura tiró por la borda el triunfo de Max a escasas vueltas del final, en un accidente que hubiera podido ser muy grave. En aquella ocasión, el daño se minimizó por el error de Hamilton en la relanzada, la mala carrera de Bottas y el triunfo de Checo.
En Qatar, la pinchadura de Bottas en la vuelta 33 encendió la alarma (los dos Williams sufrirían la misma suerte en las vueltas 50 y 52). Sabemos que Checo es un mago gestionando neumáticos, pero ¿valía la pena arriesgarse en un circuito del que no se tiene información? La respuesta para mí es más que clara. Max hizo una carrera estupenda. Un muy buen segundo lugar luego de iniciar séptimo, pues nunca estuvo en real condición de pelearle el liderato a Hamilton. Checo, por su parte, nos regaló una de sus mejores actuaciones del año. Empezó once, después de un mal sábado y terminó en la cuarta posición. Y si bien la estadística final dirá que ganó siete lugares, en pista nos regaló toda una sinfonía de rebases, diecisiete para ser exactos, algunos aprovechando el DRS, otros con el sello de la casa. Los duelos con Alonso y con Sainz fueron los mejores para mí. Es cierto que nuevamente un virtual safety car jugó en su contra, pero son variables que no podemos adivinar, solo aprovecharlas cuando suceden y desgraciadamente para Checo lleva dos al hilo del lado “equivocado”. Aun así, el cuarto lugar, sumado al abandono de Bottas, lo deja en una muy buena posición para pelear, justamente con Valtteri, el tercer lugar en el campeonato de pilotos, amén de los valiosos puntos que logró hoy para su equipo. Un buen cuarto lugar, después de haber sido duramente cuestionado por no pasar a la Q3. En un fin de semana que no se veía nada sencillo para Red Bull y en el que tuvieron que lidiar con muchos problemas, los daños fueron minimizados.
Y terminaré hablando del piloto del día, Fernando Alonso. Después de un viernes sin mayores sorpresas, el sábado se lo vio ya mucho mejor desde los libres 3, estaba disfrutando mucho el circuito, como él mismo declaró. Luego, logró un excelente quinto lugar en la clasificación. Un quinto lugar que el domingo, cual calabaza de Cenicienta, se transformaría en tercero por las penalizaciones de Bottas y de Max. Posición que Alonso aprovecharía al máximo adelantando a Gasly en la primera vuelta. Después, una sólida carrera y una arriesgada estrategia lo llevaron al tercer lugar. Tensos momentos deben haber vivido en Alpine al ver las pinchaduras de Russell y Latifi a pocas vueltas del final. Es cierto, esta última ocasionó el virtual safety car que le cayó a Alonso como anillo al dedo y le dio el último empujoncito para subirlo al podio. Suerte dirán algunos. ¿Y por qué no? Como dice aquella frase: “Suerte es lo que sucede cuando la preparación y la oportunidad se encuentran.” Además, esto no demerita en nada la gran carrera que hizo. Y así, siete años y cuatro meses después, luego de aquel segundo lugar en el Gran Premio de Hungría de 2014, Fernando Alonso subió nuevamente al podio. Una muestra más de que el talento no disminuye con la edad. Mientras tanto, él puede “seguir confiando en el plan.”
Y así cerramos el último triplete de la temporada. De América del Norte a América del Sur y de ahí hasta Medio Oriente; casi 20 000 kilómetros recorridos. Tres carreras, tres domingos consecutivos, que nos han hecho emocionarnos al máximo. Ahora sí, entramos a la recta final de esta palpitante temporada 2021. Solo nos quedan dos carreras que seguramente nos darán algunas sorpresas, una de ellas nuevamente en terreno desconocido. ¿Se decidirá alguno de los campeonatos en la próxima carrera? ¿Tendremos que esperar hasta Abu Dabi? En dos semanas lo sabremos. Nos vemos en el Gran Premio de Arabia Saudita.
