Llegó el tan ansiado inicio de la temporada 2023.
Por quinta ocasión, Bahréin tuvo el honor de recibir la primera competencia del año. Tal vez no fue una carrera tan espectacular como todos deseábamos, pero tuvo sus momentos y tal vez el gusto de ver nuevamente acción en la pista hizo que me quedara con un buen sabor de boca. ¿Repasamos un poco?
De entre los recién llegados, el debut más frustrante fue sin duda el de Oscar Piastri, abandonando por problemas con el volante de su monoplaza. Su compañero, Lando Norris, terminó en la última posición. Cierto, no estamos tan sorprendidos, sabemos que McLaren no pasa por su mejor momento, pero no creí verlo tan atrás. Cinco entradas a pits para Norris, solo le faltó probar los compuestos para lluvia… De Alpha Tauri no hay gran cosa que decir; ni Tsunoda, ni de Vries nos entregaron mucho. Tampoco de Haas, salvo la buena clasificación de Hülkenberg. Sin embargo, el domingo perdió cuatro lugares en el arranque y terminó la carrera incluso más atrás que Magnussen, ambos fuera de los puntos. Del lado de Alpine, la clasificación del sábado fue bastante buena para Ocon, no así para Gasly y el domingo los papeles se invirtieron. Ocon terminó completamente perdido en una acumulación de penalizaciones, tanto que decidieron retirar el auto. Gasly, por el contrario, en una buena carrera consiguió avanzar de la última, hasta la novena posición y rescatar un par de puntos, nada mal. Por cierto, en el auto que pudo manejar Piastri… En cuanto a Alfa Romeo, Bottas arrancó muy bien, ganando cuatro posiciones en la salida y logró finalizar en octavo lugar. Zhou se quedó con la vuelta rápida, aunque no sumó para él pues terminó fuera de los puntos. A diferencia de su compañero, él se complicó con una mala salida en la que perdió varios lugares. No fue un mal inicio para ellos, aunque esperaba, tal vez, un poquito más. Williams terminó algo mejor de lo que hubiera pensado, la estrategia les resultó y Albon se llevó el último puntito disponible, lugar diez para él y solo un poco atrás, posición doce, su recién llegado compañero Sargeant, en una discreta, pero no mala presentación.
Mercedes y sus flechas plateadas, que ya no lo son, tampoco mostraron grandes sorpresas. Creo que el quinto lugar conseguido por Hamilton y el séptimo por Russell muestran su actual realidad. Como sucedió el año pasado, será un inicio cuesta arriba. Ojalá ahora les lleve menos tiempo y puedan estar de vuelta en la pelea más temprano en la temporada. Al parecer tienen un “plan B”. Veremos a dónde los lleva.
Con algunas caras nuevas y la promesa de cambios y mejores estrategias, Ferrari iniciaba la temporada con buenas expectativas, pero el SF-23 parece no ser todavía el auto que necesitan para competir de tú a tú con Red Bull. Problemas que van más allá de un cambio de personal. Luego de una buena clasificación, en la que pudieron posicionarse en la segunda fila, sabíamos que el domingo las cosas no serían tan sencillas. Leclerc arrancó bien, pasando a Checo y tomando el segundo lugar. Más tarde, en la vuelta 26, Checo recuperó la posición. Pero lo grave vendría un poco después, pues una vez más los viejos fantasmas aparecieron y su monoplaza dijo no voy más. Un desesperado Leclerc tuvo que abandonar en la vuelta 41. El tercer lugar lo heredó momentáneamente Sainz, pero no pudo defenderlo del embate de su compatriota. Así, Alonso tomó el tercer lugar en la vuelta 46. Con todo esto, Hamilton se acercó lo suficiente para empezar también a incomodar a Sainz, pero logró mantenerlo detrás. Un sufrido cuarto lugar que le permite sumar buenos puntos, lo que ciertamente es más importante que el riesgo de perderlos todos por defender lo indefendible. Aunque no es el inicio que los tifosi estaban esperando, confío en que pronto estén dando más pelea al frente.
A menos que algo suceda, todo indica que Red Bull es el equipo a vencer. Por ahora lo tienen todo, un gran auto, al RB-19 parece no dolerle nada, dos pilotos en un excelente momento y un gran equipo alrededor. Este domingo se tuvieron la confianza para intentar lo que nadie hizo, una estrategia a dos paradas y compuestos rojos-rojos-blancos. Todo salió a pedir de boca, la degradación no fue un problema para ellos. No olvido que Williams también hizo un primer cambio de rojas por rojas, pero ellos fueron a tres paradas. Regresando a Red Bull, Checo tuvo una complicada salida yendo por el lado sucio. Leclerc lo presionó y perdió la posición, luego fue Sainz quien entró a la carga, pero no consiguió pasarlo. Más adelante recuperó el segundo lugar sin mucha oposición por parte del monegasco, aunque todo esto lo alejó de Max y de un posible duelo interno por el primer lugar, que hubiera sido muy interesante. Hablando de Max, arrancó con autoridad y de inmediato, con la ayuda involuntaria de Leclerc, puso tierra de por medio entre él y el resto. Sencillamente hizo todo bien, salvo escuchar a su ingeniero, pues decidió nuevamente no acatar una orden directa. Es apenas la primera carrera del año y la paciencia de Lambiase parece estar al límite. Para ambos Toros la última parte de la carrera fue tranquila, incluso poco los vimos en la transmisión. Un inicio muy diferente al del año pasado, pues ahora todo eran caras sonrientes y tranquilas tras la carrera.
Aston Martin empieza el año mostrando que será un equipo a tomar en cuenta, algo de lo que ya se hablaba mucho tras los test de pretemporada. Este domingo se sobrepusieron a una desafortunada salida en la que Stroll hizo contacto con Alonso, algo que pudo terminar en catástrofe. Stroll consiguió una buena carrera terminando en la sexta posición, a pesar de no estar completamente recuperado de su muñeca. De Fernando Alonso, piloto del día, qué les puedo decir. Creo que el asturiano está saboreando merecidamente este inicio de ensueño. Pudimos disfrutar algunos duelos y rebases: a Russell, Sainz y por supuesto Hamilton, lo que a más de uno nos hizo ir algunos años atrás y recordar un par de monoplazas McLaren… Estrenar la temporada con un tercer lugar debe ser una gran satisfacción. Por cierto, es el tercer podio que Alonso y Checo comparten. La primera vez fue en 2012 y fue también el primer podio de Sergio Pérez en la Fórmula 1. ¿Cómo olvidar aquellas últimas vueltas del Gran Premio de Malasia? Un muy joven Checo, en una carrera algo loca y complicada, sobre asfalto húmedo, a la caza de un dos veces campeón en las vueltas finales. La segunda vez que compartieron podio fue unos meses después, también en 2012, en el Gran Premio de Italia. Tuvieron que pasar más de diez años para que sucediera nuevamente. Y algo me dice que no pasará mucho tiempo para volver a verlo. Además, fue muy agradable escucharlos platicar en español antes de la ceremonia de premiación y tal vez muy pronto podríamos ser testigos de un podio en donde todos hablen español, con Sainz acompañándolos. Sería genial. En todo caso, espero que este año puedan regalarnos grandes duelos.
Pues bien, ésta fue tan solo la primera cita de las 23 que tendremos en el año. El engranaje apenas empieza a ponerse en marcha. Muchos equipos mejorarán, lo deseo por el bien del espectáculo, otros tal vez no puedan seguir el ritmo y seguramente otros más tendrán malas rachas. Los fierros no tienen palabra, ya lo sabemos.
Lo más importante es que la temporada 2023 ya es una realidad. Finalmente, tras ciento cuatro días de espera, las luces volvieron a apagarse.
Para la próxima carrera llegaremos al rápido y complicado circuito callejero de Jeddah. Aquí consiguió Checo su primera pole el año pasado. En estas pistas suelen lucir mucho las manos de los pilotos y las cosas podrían ser muy diferentes a lo que vimos este domingo…
Nos vemos en Arabia Saudita. Gracias por leerme.
