Pol Espargaro no se encuentra del todo cómodo en el trazado luso, sin embargo este tiene el pase a la Q2 de forma provisional ya que finalizó el día en 8º posición
El trazado de Portimao se caracteriza por ser un trazado inverosímil en el calendario, debido a su orografía. Es por ello que los pilotos y las maquinas son llevadas al límite en dicho circuito a pesar de disfrutar del mismo.
“Es un circuito muy exigente, tanto físicamente como mentalmente. Son muchas cosas que hay que poner en su sitio, pero al final creo que estamos bien colocados”, resumió Espargaro.
Los pilotos de MotoGP pudieron rodar aquí hace un mes para poder familiarizarse con el circuito, aunque las sensaciones desde entonces son completamente diferentes.
“Antes de rodar con la MotoGP, pensaba que una conducción agresiva sería lo mejor. Pero a medida que he ido dando vueltas, creo que cuanto más fluyes, más rápido vas. Si exageras o fuerzas más de la cuenta, los tiempos no salen”, añadió Polyccio.
La orografía del circuito es cuando menos parecido al trazado de Mugello, por lo que el pequeño de los Espargaro quiso hacer un símil con respecto al trazado ya comentado.
“Mugello es un circuito parecido en el nivel de adrenalina que llevas cuando paras en el taller. La gran diferencia es que normalmente conocemos los circuitos, y en este caso, todo es muy estresante”.
Volviendo al trazado de Portimao, el catalán quiso dar su punto de vista al respecto.
“Yo no diría que es un circuito peligroso, pero evidentemente hay puntos en los que te puedes caer muy rápido. Eso sí, no me gustaría para nada jugarme el título aquí. Hay muchos puntos críticos, en los que el tren delantero se puede cerrar e irte al suelo”, remachó el catalán.
