La fábrica de Iwata empieza a moverse en el mercado de pilotos, pues a pesar de que la mayoría de pilotos tienen contrato para los próximos años, estos han llamado a la puerta del portugués Miguel Oliveira
Los de Mattighofen están muy contentos con el piloto de Almada, pues desde 2017 ambas partes están caminando en la misma dirección, aunque en el pasado también compartieron algunos años más. Sin embargo, Miguel, al igual que otros tantos pilotos, tienen contrato para el próximo año con sus respectivos equipos, aunque éste, ya fue llamado por Yamaha de cara a la próxima temporada.
Todo esto se debe a que Maverick Viñales solicitó romper su contrato a final de la presente temporada, dejando así, la Yamaha oficial libre. Es por esto, que los de Iwata han puesto todos sus ojos en el portugués, ya que el rendimiento mostrado esta temporada es cuanto menos bueno, además de tener ya bastante experiencia en la categoría. Sin embargo, como era de esperar por parte de Miguel, la primera respuesta a este nuevo culebrón es una negativa, ya que esta muy contento en la fábrica austriaca.
«Hablando del mercado y de los contratos, especialmente en estos tiempos modernos, he tenido que demostrar que cuando no hay voluntad por parte del piloto o del equipo de continuar, esos contratos se rompen», explicó Oliveira.
Aunque Miguel haya declinado la oferta de Yamaha, avisa que los contratos se pueden romper por ambas partes, ya que esto es una relación bilateral, y en el paso ya se vio como algunos pilotos y equipos decidieron terminar el contrato antes de tiempo, por lo que todas las puertas están «abiertas» para la gente de Iwata.
«Tener un contrato firmado vale lo que vale hoy en día. El año pasado me comprometí con mi equipo por dos años, y voy a respetar mi palabra. Por supuesto, esta situación de Viñales ha provocado cierto nerviosismo en las conversaciones para el futuro. A mí también se me planteó en este sentido, pero, como he dicho, mi atención es para mi equipo. Es un gran equipo, y creo que puedo ser campeón del mundo con ellos, y tengo contrato», remachó.
