Portimao será donde Marc Márquez vuelva a la competición este fin de semana, tras su ausencia desde Julio de 2020
La larga espera y recuperación parece que acabó finalmente para el #93, ya que esté, si podrá estar sobre una MotoGP en las condiciones de seguridad que él mismo requiere, como a su vez, el estado de forma correcto para llevar el prototipo de Honda. Sin embargo, Marc ya estuvo rodando semanas atrás con motos de calle que se «asemejan» en prestaciones a una MotoGP, aunque la RCV213 será el último peldaño de su recuperación.
“Es una gran sensación volver a MotoGP, con mi equipo y mi moto. Hemos trabajado muy duro para conseguirlo, muchas horas en el gimnasio y con mi fisio Carlos».
A pesar de haberse perdido las dos primeras de Catar y estar a -40 puntos del líder, el chico de Cervera no quiere superar los límites este fin de semana, ya que prefiere volver a conocer la moto, como a su vez, buscar el balance perfecto para el resto de temporada. Ya que él, no tuvo pretemporada ni la experiencia de las dos primeras carreras, por lo que seguramente, recabará los máximos datos posibles.
«Nos hubiera gustado estar en Catar, pero finalmente mis médicos me desaconsejaron y los escuché. Realmente me he centrado en escuchar a los médicos y entender mi cuerpo para poder volver a MotoGP y hacer lo que amo. Tengo un poco de experiencia en Portugal, pero el objetivo de este fin de semana es trabajar bien. Poco a poco vamos volviendo y esto es muy positivo después de un largo período”.
Finalmente, Marc no cuenta con experiencia en el circuito de Portimao con una MotoGP, ya que el año pasado fue la primera edición. Sin embargo, el #93 ya rodó aquí hace no mucho con la moto de calle, por lo que las líneas a seguir las conoce, aunque ahora, le cambiarán las referencias.
