El piloto mexicano habló con más calma de la carrera del domingo, en la que cree que la suerte no estaba de su lado y le consuela pensar que demostró un buen ritmo
Sergio Pérez no tuvo la carrera que deseaba el pasado Gran Premio de Rusia. Y es que el mexicano estaba haciendo una buena carrera en el primer stint. El de Red Bull llevaba neumáticos duros frente a todos sus rivales por delante que usaban medios.
Esto le permitió alargar más su parada y hacer un teórico overcut para situarse tercero, después de estar séptimo detrás del tren de DRS. El problema fue que una mala parada de su equipo le costó más de 8 segundos por lo que salió de boxes en quinta posición.
A pesar de ello, Checo se repuso y en las últimas vueltas volvió a colocarse tercero justo cuando comenzaron a caer gotas en Sochi. Pero con el comienzo de la lluvia el mexicano se encontró con varios rivales por esa tercera posición, entre ellos, el bicampeón Fernando Alonso y Charles Leclerc.
El asturiano le adelantó y los tres apostaron por quedarse más en pista a pesar de la lluvia, ya que creían que podía parar. Finalmente, no fue así y aumentó, por lo que entraron muy tarde y salieron más atrás, terminando Checo noveno.
El mexicano afirmó que cree que ese día la suerte no estaba de su lado, como recogen desde Speedweek: «Ese día, la suerte no estuvo de nuestro lado. Estábamos en el camino del podio, pero era realmente difícil decidir cuándo era el momento perfecto para cambiar de los neumáticos lisos a los intermedios.»
«Si sólo llovía ligeramente, se podía continuar con los neumáticos lisos. Si llueve más fuerte, es inevitable cambiar a los intermedios. En retrospectiva, tomamos la decisión demasiado tarde«, afirmaba Pérez.
A pesar de ello, el mexicano se mostró positivo debido a su buen ritmo en carrera: «Podría haber habido más en esta carrera. Pero me consuela pensar que fuimos capaces de mostrar una buena velocidad y queremos llevar este impulso a las próximas carreras«, concluyó Checo.
