El asesor de Red Bull se mostró enfadado tras el fallo del neumático de Verstappen, además de comentar que el holandés nunca fue al límite
Helmut Marko no estaba nada contento después de lo que sucedió en el Gran Premio de Azerbaiyán cuando Max Verstappen perdía el control de su monoplaza en plena recta a más de 300 km/h después de que su neumático trasero izquierdo se pinchara.
Esto provocó que el doblete que tenía el equipo hasta ese momento desapareciera y que Hamilton consiguiera una segunda posición desde la que recortaba puntos a su rival, el piloto holandés.
Finalmente, la fortuna provocó que en la resalida, tras la bandera roja después del accidente de Max, Hamilton se pasara de frenada justo cuando había ganado la primera posición, y así acabó al final de la parrilla.
A pesar de ello, el asesor de Red Bull se mostró frustrado por lo sucedido con su piloto, como mostró para la cadena ORF austriaca: «Hemos controlado la carrera con creces, Max ha conducido en cabeza.»
«Ha registrado vuelta rápida tras vuelta rápida. Y eso sin estar al límite. No estaba conduciendo a plena potencia y la gestión de los neumáticos era óptima. No hubo signos de vibración ni problemas con la temperatura», explicaba el austriaco.
Mientras tanto, el jefe de Red Bull, Christian Horner, hablaba para Sky Sports F1 de lo que supusieron esas dos últimas vueltas tras la relanzada y cómo Sergio tuvo suerte de poder acabar la carrera.
«Sergio no tuvo una buena salida. En cambio, Lewis sí, pero se ve que los frenos echan humo, así que la magia no funcionó ahí. A partir de ahí fue cabeza abajo para Sergio y sufrimos un problema hidráulico esperando que no empeorara», decía Horner, algo que no ocurrió hasta cruzar la meta.
Ahora el equipo se prepara para las siguientes carreras donde podremos ver los circuitos clásicos europeos como Spielberg o Silverstone: «Ahora volvemos a los circuitos clásicos, lo que será interesante de ver. ¡El juego ha comenzado!», finalizó el jefe de la escudería austriaca.
