Excelente domingo para Red Bull y malo para Ferrari, el Cavallino Rampante no pudo galopar hacia la victoria en casa.
Este fin de semana nos trajo un poquito de todo. La lluvia se hizo presente, la clasificación fue un desfile de banderas rojas y tuvimos la primera carrera sprint de la temporada. Debo decir que esta vez me pareció más entretenida que las del año pasado; el botín de puntos es ahora más atractivo y creo que eso se vio reflejado en la pista, aun así, como lo platicaba con un amigo, uno se queda con la sensación de querer más… En fin, creo que llegaron para quedarse y más vale ir acostumbrándose a ellas. Además, para algunos pilotos, como Carlos Sainz y Checo Pérez, representó la oportunidad perfecta para remontar posiciones y recuperarse de una no tan buena clasificación. Y así, la mesa estaba servida para tener, de nuevo, a Ferrari y a Red Bull repartiéndose las dos primeras líneas de salida.
Si bien, seamos honestos, la carrera no fue tan espectacular, tuvo sus momentos. No olvidemos que es un trazado que no da mucha pauta a los adelantamientos y que además estuvimos prácticamente la mitad de la carrera con el DRS inhabilitado. Iniciamos con el asfalto mojado y serias posibilidades de que llegase nuevamente la lluvia. De haber sucedido, seguramente hubiéramos tenido un sinfín de cambios en las posiciones… pero no llegó, la pista fue secándose poco a poco y con ello se fueron modificando las estrategias, a pesar de las amenazantes nubes cercanas al circuito al final de la carrera que me hicieron pensar en aquel caótico desenlace de Sochi 2021.
Para McLaren, después de una carrera sprint en donde lograron posicionarse 5 y 6, el domingo solo pudieron sonreír con Norris, quien con un buen desempeño logró subirse al último escalón del podio tras el revés de Leclerc. Ricciardo tuvo un muy mal domingo. Un desafortunado toque con Sainz al inicio y ya no pudo enderezar el rumbo, terminó en la última posición. Haas, por su parte, si bien ha venido perdiendo un poquito de ese empuje con el que inició el año, no lo está haciendo nada mal. No olvidemos que terminaron la temporada 2021 en ceros y en todo 2020 solo sumaron en dos carreras. Ahora, Magnussen ha logrado terminar en la zona de puntos en tres de las cuatro citas que se han disputado. Aston Martin rompió finalmente el cero, cuatro puntos para Vettel y uno para Stroll. Si bien no es mucho, salir del fondo de la tabla debe ser un aliciente anímico para ellos. Un mal fin de semana para Alpine que no logra hacerse de ningún punto, sin mencionar el abandono de Alonso por un toque con Schumacher; pasan los años y el mismo apellido sigue rondándolo en Imola… Para Alpha Tauri, esta vez Tsunoda lo hizo mejor colándose al séptimo lugar, mientras que Gasly terminó doce. Quien debe estar más que feliz de haber abandonado aquel barco llamado Mercedes es Valtteri Bottas. Finalizó con un destacable quinto lugar el domingo, sin olvidar el séptimo en la sprint. Con tan solo cuatro carreras disputadas, Alfa Romeo tiene ya doce puntos más de los que tenía el año pasado al terminar la temporada, sin duda un buen avance para ellos.
Mercedes sigue sin encontrar el norte. Russell terminó por delante de Hamilton tanto el sábado como el domingo. Si bien no logró llegar a la zona de puntos en la sprint, en la carrera consiguió ganar cinco lugares en el inicio y finalizó con un bastante decoroso cuarto lugar. En cuanto al fin de semana de Hamilton, no hay mucho rescatable. Lapeado en la vuelta 41, cuesta trabajo creer cuánto ha cambiado la situación en tan solo algunos meses. Se estancó detrás de Gasly y de ahí no pasó, terminó la carrera en el lugar 13. Russell logró mejorar siete posiciones, Hamilton batalló toda la carrera. Dejando a un lado las dificultades con los monoplazas. ¿Russell se está adaptando mejor? ¿Pasa algo más? Veremos qué tanto logran enderezar el rumbo conforme avanza la temporada, si es que logran hacerlo, y sobre todo hasta dónde llega la resiliencia de Hamilton.
Este domingo, en el Autódromo Enzo e Dino Ferrari no pudieron festejar por todo lo alto como hubieran deseado los tifosi que se dieron cita en Imola. Recordemos que es la primera vez, desde el regreso del circuito al calendario oficial, que las actividades tenían lugar con las gradas totalmente llenas dejando de lado las restricciones sanitarias. La mesa estaba puesta para una fiesta en casa que terminó aguándose y no precisamente por la lluvia. Carlos Sainz tuvo un fin de semana de contrastes. Después de marcar un muy buen tiempo en la Q2 del viernes y con las condiciones de pista difíciles, pierde el auto y con eso su posibilidad de pelear por un mejor lugar en la Q3. El sábado logró componer las cosas y desde el décimo lugar fue ganando posiciones poco a poco hasta llegar a la cuarta. El objetivo del día estaba cumplido. Pero en la salida del domingo, Ricciardo lo golpea sacándolo de la pista y dejándolo estancado en la grava, adiós a sus posibilidades de seguir en la pelea. Leclerc, por su parte, si bien perdió la posición con Checo en la salida, venía haciendo una buena carrera. Sin embargo, después de una segunda parada en boxes de los tres punteros, a poco menos de diez vueltas del final, Leclerc vuelve a colocarse muy cerca de Checo y en plena persecución pierde el auto, hace un trompo y termina golpeándose contra el muro. Para su buena fortuna logra regresar a la pista, pero debe entrar nuevamente a boxes y aunque consigue remontar algunos lugares, finaliza en la sexta posición solamente. Muy lejos de las expectativas que se tenían. Vio una posibilidad y lo intentó, lo cual, conociendo su temperamento, era de esperarse. El que no arriesga no gana, dicen por ahí, pero creo que se presionó y terminó desesperándose. Con el abandono de Sainz tal vez hubiera sido mejor mantener la cabeza fría y asegurar esos puntos para seguir teniendo una buena ventaja sobre Max… Hubiera, pero no fue.
En cuanto a Red Bull, se despiden de Imola con una gran sonrisa. Entre el sábado y el domingo, se van de Italia con nada menos que 58 puntos, contra tan solo 20 de Ferrari. Lo que parecía una diferencia abismal se redujo de una forma que nadie hubiera podido imaginar hace unos días. Aquel desfile de banderas rojas que complicaron la clasificación de Checo rezagándolo a la séptima posición se desvaneció con la excelente actuación que nos regaló el sábado. El domingo, en una muy buena salida, pasó a Leclerc y se quedó con el segundo lugar. El monegasco solo estuvo por delante de Checo después de su primera parada en pits pero fue por muy poco tiempo, pues perdió rápidamente la posición. Durante el resto de la carrera, llegó a estar a menos de un segundo de Checo en varias ocasiones, pero no vimos un franco duelo, el “otro” se mantuvo adelante. Luego, vendría el trompo de Leclerc a pocas vueltas del final y la historia estaba contada. En cuanto a Max, hizo lo que tenía que hacer sin cometer errores, podemos decir incluso que tuvo un domingo bastante tranquilo, tomando en cuenta las circunstancias, algo en lo que, creo, Checo tuvo bastante que ver. Consiguió, además, el segundo Grand Chelem de su carrera. Así, Red Bull logró un gran doblete, el primero desde Malasia 2016, doblete que además llega justo en el momento preciso, pues los problemas de Ferrari hacen todavía más redituable esta buena cosecha de puntos. Los fierros no les fallaron esta vez, ni los fierros ni nadie. Parece que la suerte empieza a cambiar. Sí, seguimos en el inicio de la temporada, pero Ferrari se escapaba peligrosamente y parecía que nada podría detenerlos, mucho menos en casa. Ahora las distancias se han acortado y la escudería de la bebida energética está de vuelta en la pelea.
¿Con qué me quedo? Sin duda, con la entrada de Max Verstappen y Checo Pérez, lado a lado, a la ceremonia del podio, un pequeño gran gesto que manda un claro mensaje.
Y ahora, como siempre, no queda más que esperar. Una nueva cita nos aguarda en otro continente. Este año la Fórmula 1 llega muy pronto a América. Un trazado en el que todos partirán de cero. Interrogantes, expectativas y muchos datos por analizar serán el platillo principal del menú. ¿Quién logrará sacar el mejor provecho de este nuevo circuito? Ya pronto lo sabremos. Nos vemos en dos semanas en el primer Gran Premio de Miami.
