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Si ahora podemos decir que hemos sido testigos de la que para muchos de nosotros ha sido la mejor carrera de la temporada y no de una gran tragedia es nuevamente gracias al halo.

Silverstone es un clásico al que año con año estamos felices de regresar. Una emocionante y sorpresiva clasificación bajo la lluvia. La primera pole de Carlos Sainz. Ferrari y Red Bull repartiéndose de nuevo las dos primeras líneas de salida. Mercedes, solo un poco más atrás, con notables mejorías y sus pilotos queriendo tener una gran actuación en casa. La mesa estaba puesta, todos esperábamos una gran carrera y vaya que la hemos tenido.

El escalofriante accidente en la salida con varios monoplazas involucrados nos trajo largos minutos de espera y de preocupación. Tsunoda, Ocon y Russell terminaron con daños en sus monoplazas, aunque solo este último no pudo continuar. Terminó aquí su impresionante racha en el top 5 y justo en su carrera de casa. Otro de los involucrados, Albon, se llevó un fuerte impacto, más de uno, en realidad. Zhou fue el protagonista de uno de los más impactantes accidentes que hemos visto en mucho tiempo. Su auto deslizándose de cabeza y pegando contra el muro de neumáticos, para luego volar por encima y afortunadamente ser detenido por la malla de protección, es algo que no vamos a olvidar. Y nuevamente aquel halo tan criticado en sus inicios, incluso por algunos pilotos, fue el héroe del día y por partida doble, pues unas horas antes también salvó la vida de Roy Nissany, en la Fórmula 2. Cuando vemos las imágenes no nos queda más que agradecer todo lo que se ha hecho en busca de la seguridad de los pilotos y de todos los involucrados en la pista, así como de los espectadores. Tanto Albon como Zhou se encuentran bien y ya pensando en el próximo gran premio. Vaya carácter. Después de la bandera roja, la carrera se reinició con partida detenida, regresando a sus lugares originales. Algo que ciertamente perjudicó a quienes habían ganado posiciones como Hamilton, Alonso y Max, que ya lideraba la carrera. Pero se siguió el reglamento.

En esta carrera hubo un poco de todo. Gasly y Bottas abandonaron, lo mismo que Ocon, cuya salida ocasionó el safety car que le vino a dar una voltereta a la carrera y nos hizo vivir uno de los mejores cierres, pero ya llegaremos a eso… Tras el impacto al inicio, aunque Tsunoda pudo continuar, su carrera ya no mejoró, tuvo además un contacto con su compañero. Tras el toque con Gasly y como si de una coreografía se tratara, pudimos ver a ambos autos hacer un trompo y salir de la pista completamente sincronizados, solo faltó la música de fondo. Difícil domingo para Alpha Tauri. Después de la sorpresa del sábado y con tantos abandonos, parecía que Latifi tal vez podría romper el cero, pero se fue sin puntos nuevamente. Stroll y Ricciardo también fuera de los puntos, además, Ricciardo muy lejos de su compañero, lo que hace todavía más notorio su mal día. Por el contrario, Vettel tuvo una gran recuperación, pues tras salir en la posición 18 avanzó hasta la nueve. El día había empezado bien para él, pues antes de la carrera pudo conducir su Williams FW14B, con el que Nigel Mansell ganó el campeonato de 1992. Y para cerrar con broche de oro, su pupilo sumó sus primeros puntos en la máxima categoría. ¡Feliz cumpleaños, Seb! O feliz Navidad, como se diga. Alguien que también terminó el día con una sonrisa de oreja a oreja fue Guenther Steiner pues por primera vez en la temporada pudieron sumar con ambos autos. Magnussen se llevó el último punto disponible, posición 10 para él. Y en un gran domingo, Mick se coló hasta el octavo lugar y no contento con eso, atacó y atacó, hasta el último segundo de la carrera, al malherido RB18 de Verstappen. Finalmente, no pudo ganarle la posición, aun así, creo que éste será un día inolvidable para él. Alonso y Norris nos regalaron también una gran carrera, terminaron quinto y sexto respectivamente. Fueron también testigos de primera fila en la intensa lucha que se vivió al final de la carrera e incluso por momentos tomaron parte, sobre todo Alonso. Buen resultado para ambos.

Regresando a Verstappen, esta carrera debe haber sido por demás frustrante para él. Dos veces ganó la posición con Carlos Sainz, dos veces lideró la carrera. Pero en ambas ocasiones, por un corto tiempo. Poco después de tomar por segunda vez la punta, se vio obligado a entrar a boxes por lo que parecía una pinchadura, pero fue una pieza que se le incrustó a su monoplaza la que ocasionó los daños, por lo que su rendimiento estaba irremediablemente comprometido. Llegué a pensar que abandonaría, pero, logró mantenerse y salvar la séptima posición. Muy lejos de lo que él esperaba, pero en una temporada tan larga, todo punto ganado es importante. En un principio se pensó que la culpable había sido una pieza de Ferrari. Al parecer fue un pedacito del alerón delantero de un Alpha Tauri. Y así, sin quererlo, aquel ballet en la vuelta 11 entre Yuki y Gasly, trajo serias consecuencias para su escudería hermana.

Checo Pérez tuvo un inicio de carrera por demás complicado. En su primera salida perdió dos lugares. Sin embargo, haría la relanzada desde su posición original, lo cual le daba una segunda oportunidad. Esta vez su salida fue buena, mucho, pensé que incluso podría ganarle la posición a Max, pero terminó teniendo un contacto con Leclerc y su alerón delantero quedó dañado. Tuvo que entrar a pits en la vuelta seis y salió en la última posición, el panorama se veía complicado. Pero ya alguna vez un contacto, también con Leclerc, lo había lanzado al final de la parrilla y las cosas terminaron muy bien en aquella ocasión, así que, no todo estaba perdido. A remar, no quedaba de otra, y poco a poco fue ganando lugares. Por increíble que parezca, justo antes del abandono de Ocon, Checo ya estaba en la cuarta posición. Gran remontada, otra en su carrera, recordándonos que debe pelearse siempre hasta el final. Pero lo mejor apenas vendría.

Vuelta treinta y nueve, Ocon le dice a su equipo que tiene problemas, vemos como su auto empieza a rezagarse. ¿Logrará llegar a boxes? No, no lo logra, su auto se queda en la pista y ocasiona el safety car que vendría a poner las cosas de cabeza y a deleitarnos con uno de los más espectaculares finales que he visto en mucho tiempo. ¿Queríamos emoción y lucha entre los punteros? Pues en esta carrera tuvimos en una sola dosis toda la que no habíamos podido tener en las pasadas carreras. Y no entre dos, sino entre cuatro pilotos y hasta cinco por momentos. Leclerc, Sainz, Hamilton y Checo, seguidos por Norris y Alonso iban al frente al momento del safety car y todos, salvo Leclerc y Norris aprovecharon para entrar a pits por blandos. Norris lo hizo finalmente una vuelta después y perdió la posición con Alonso. Pero adelante todo se mantuvo igual. En la relanzada Leclerc sería el único con neumáticos duros. Si bien fue Hamilton el que cuestionó a su equipo sobre si habían acertado con el compuesto, era evidente que quien estaría en inferioridad sería Leclerc, quedaban muchas vueltas por delante. Y así fue. Una verdadera cacería. Justo antes de la relanzada, en un optimista (no encuentro cómo llamarlo) team radio le pidieron a Sainz que abriera un espacio de 10 autos entre él y Leclerc a lo que Sainz respondió con un maravilloso “stop inventing” y con toda razón. Tenía pegados a él a Hamilton y a Checo, me pregunto ¿qué carrera estarían viendo en el pitlane? Era obvio que Leclerc no podría sostener esa posición mucho tiempo e intentar lo que le pedían hubiera comprometido la carrera de ambos. Para Leclerc la suerte estaba echada desde que decidieron no lo meterlo a pits. Se va el auto de seguridad e inmediatamente empezaron a presionar. Sainz atacó a Leclerc y Checo a Hamilton, casi al mismo tiempo ambos ganaron la posición, no sabía uno a dónde mirar, ni la transmisión sabía qué mostrarnos. Checo y Hamilton se acercaban cada vez más a Leclerc. Finalmente, Checo atacó a Charles quien no cedió y avanzaban rueda con rueda, siguieron así varias curvas hasta que, en una gran maniobra, Hamilton aprovechó y los pasó a ambos. Pero duraría poco, Checo no perdió un segundo y en plena curva, metió el auto por el interior y volvió a pasarlo, Leclerc aprovechó y lo pasó también. Durante algunos instantes, Alonso también atacó a Hamilton, seguidos muy de cerca por Norris, aquello era una verdadera locura. Hamilton no quitó el dedo del renglón y en la vuelta 48, por el exterior de la curva Luffield, en un bello rebase, pasó a Leclerc. Leclerc contraatacó con todo y recuperó la posición, pero volvió a perderla un poco más adelante y esta vez ya no le alcanzaría para tomarla de nuevo. Hizo lo que pudo y hasta un poco más, dadas las circunstancias. Pero, un momento… ¿y Sainz? Pues después de retomar el liderato en la relanzada y aprovechando el tornado detrás suyo, hizo lo que tenía que hacer, puso tierra de por medio y se alejó lo suficiente para no tener ninguna sorpresa hasta ver caer la bandera a cuadros.

Vaya duelos, defensas y rebases que tuvimos condensados en unas cuantas vueltas y nada menos que en las rápidas curvas de Silverstone. Espectacular. Un muy merecido triunfo para Sainz que se recuperó de algunos errores en el inicio y pudo convertir así su primera pole en su primera victoria en la Fórmula 1, bien por él. La primera vez que un español sube a lo más alto del podio desde aquel Gran Premio de España en 2013 con Fernando Alonso. Y qué decir de Checo, vaya carrera. Otra espectacular remontada que nos hizo emocionarnos al máximo. Hamilton, que también hizo una gran carrera, pudo darse el gusto de subir al podio en casa. Si bien hay siempre solo un ganador, pudimos ver caras satisfechas en la premiación y creo que eran sinceras. Hay segundos y terceros lugares que saben muy bien porque sencillamente sabes que lo dejaste todo en la pista.

Numerosas imágenes quedarán grabadas en nuestra mente, desde el auto de Zhou boca abajo, o el de Albon cruzando peligrosamente frente a otros monoplazas luego del fuerte impacto que lo regresó a la pista, hasta Russell corriendo para asegurarse de que sus compañeros estuvieran bien, sin olvidar el emotivo abrazo entre Vettel y Mick. Una de esas carreras que recordaremos mucho tiempo.

Y ahora, después de tantas emociones vividas, habrá que dar rápidamente vuelta a la página pues la siguiente cita ya casi está aquí. Silverstone puso la vara muy alta, pero estoy segura de que el Red Bull Ring nos aguarda con varias sorpresas bajo el brazo y la segunda carrera sprint de la temporada. La casa de los Toros será la sede de la undécima carrera. Nos vemos en Austria.

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