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Contra todo pronóstico, el doble podio en tierras galas se lo llevó Mercedes. Una gran actuación de Sainz y otro descalabro para Leclerc que le da a Max su séptimo triunfo del año.

Paul Ricard no es célebre por regalarnos trepidantes competencias y ésta no fue la excepción, aunque tuvo sus buenos y entretenidos momentos. Además, tal vez no lo veamos en el calendario el próximo año, lo que le da cierta nostalgia a esta carrera. La ola de calor que azota Europa pronosticaba un domingo altamente demandante para los pilotos y lo fue. Repasemos lo que se vivió en Le Castellet.

Williams y Alfa Romeo fuera de los puntos. Latifi y Zhou abandonaron, además este último tuvo un contacto con Mick por el que recibió una penalización de 5 segundos. Nada rescatable para ellos este fin de semana. Como tampoco lo fue para Alpha Tauri. Gasly tuvo una carrera para el olvido en casa, ya el sábado se había visto claramente superado por su compañero en la clasificación. El francés quedó fuera en la Q1 y Yuki se coló hasta la Q3. Desgraciadamente para Yuki, el toque con Ocon comprometió su carrera y terminó abandonando. Y hablando de Ocon, él tuvo una actuación más rescatable en casa, ese contacto con Yuki le valió una penalización de 5 segundos, pero logró terminar en la posición número ocho. Mejor fin de semana fue el de su compañero. Alonso lo superó en la clasificación y el domingo en otra buena actuación terminó con un sexto lugar. Cabe mencionar que Alpine se coloca ahora en el cuarto lugar de constructores, por delante de McLaren. Por cierto, Fernando Alonso es ya el piloto con más vueltas de carrera en la Fórmula 1, superando a Kimi. Para Aston Martin, este fin de semana, más allá del aniversario número 100 de su primera incursión en el Gran Circo, en aquel Gran Premio de Francia de 1922, no tuvo gran cosa que festejar. Bueno, si acaso el punto logrado por Stroll, vaya batalla con Vettel para conseguirlo, me hicieron olvidar por un momento que son coequiperos. Posiciones 10 y 11 para ellos. Ricciardo y Norris pudieron sumar en Francia, lugar nueve para el australiano, tal como inició, mientras que Norris, quien comenzó quinto, terminó cayendo dos lugares. Resultado positivo, aunque discreto para una escudería que parecía despegaría un poco más. En cuanto a Haas, creo que tenían un auto competitivo este fin de semana y hubieran merecido una mejor suerte. Primero le borraron a Mick su tiempo de clasificación y tuvo que empezar desde muy atrás, como también lo hizo Magnussen, pero en su caso se debió a penalizaciones por integrar elementos nuevos en su unidad de potencia. Grandes salidas de ambos, mejor la de Magnussen quien pasó de la posición 20 a la 13 en la primera vuelta. Luego, en carrera, ambos vehículos tuvieron toques, Mick con Zhou y Magnussen con Latifi. Magnussen abandonó y Mick no llegó más allá de la posición 15. Ojalá que en Hungría corran con mejor suerte, literalmente.

Si hablamos de días malos, creo que nadie tuvo uno peor que Leclerc. Ya no sé si pueda seguir hablando de giros inesperados, pues parecen convertirse en una constante. Ese grito de rabia y desesperación que pudimos oír tras haber perdido el auto es de lo más triste que he escuchado en un team radio. Todo parecía llevarlo a un triunfo casi seguro, ya que fueron nuevamente mejores en pista. Ningún piloto está exento de cometer un error, pero para alguien con uno de los mayores niveles de autoexigencia y de autocrítica que he visto, debe ser más difícil. “Nunca podré ser campeón del mundo si sigo cometiendo errores como éste” declaró un poco después en entrevista. Lo positivo, creo, es que la siguiente carrera llega muy pronto y justo después viene el receso de verano, que le dará tiempo para analizar con más calma lo sucedido.

Del otro lado de la moneda, esta vez, tenemos a su compañero. Inicialmente, se dijo que Carlos Sainz tendría 10 lugares de penalización, finalmente decidieron cambiar más elementos y saldría último, solo por delante del Haas de Magnussen. Sainz hizo una extraordinaria carrera, sin desesperarse, ganando lugares y si bien al final tuvo que hacer otra parada en pits, pues sus medios no llegarían al final, logró terminar en el lugar número cinco. Como cinco fueron los segundos de penalización que recibió tras el unsafe release, aunque lo que quedará para el recuerdo es el team radio con su ingeniero tras anunciarle la noticia (cuando lo corrige oportunamente). Qué bueno que Sainz tiene bien claro lo que es y lo que no es un Stop and Go. Carlos Sainz se llevó también el punto extra por vuelta rápida. Consiguió con creces minimizar los daños de su penalización. Además, fue merecidamente elegido piloto del día.

Mercedes ha mejorado en las últimas carreras, es evidente, pero parecen, además, estar siempre en el momento justo, en el lugar adecuado. Un doble podio inesperado, el primero de la temporada, lo que en años anteriores era algo tan común que aburría. Cierto, se volvieron a ver beneficiados por el abandono de Leclerc. Todavía no me atrevería a asegurar que están listos para pelear podios en cada carrera, pero en esta mostraron buen ritmo y creo que seguirán mejorando. Mientras ninguna otra escudería alce la mano, seguirán sumando y conservando ese tercer lugar, su fiabilidad hasta ahora ha sido impecable. Sobra decir que si los problemas de los líderes continúan… podríamos tener alguna sorpresa al final de la temporada. Este domingo le recortaron 22 puntos a Ferrari. Por cierto, Hamilton celebró con un podio sus 300 carreras de Fórmula 1.

Termino hablando de Red Bull. En términos generales fue un buen fin de semana para ellos, 37 puntos se llevan a casa, mientras que su principal competidor solo pudo sumar 11. Max hizo una buena carrera, tomó el liderato tras el descalabro de Leclerc y se llevó una victoria bastante tranquila, por decirlo así, pues Hamilton nunca representó un peligro. Sesenta y tres puntos lo separan ya de Leclerc. Si bien todavía quedan muchos por repartirse, creo que independientemente de lo que suceda en Hungría, podrá irse bastante tranquilo a la pausa de verano. Como también bastante tranquilo se irá Red Bull pues ya son poco más de ochenta puntos los que tiene sobre Ferrari. Quien tuvo un día complicado fue Checo Pérez. Desde el inicio de las actividades en tierras galas no se lo vio cómodo con el auto. El tercer lugar en la clasificación parecía resolver un poco la situación. Luego, el domingo, las cosas no salieron tan bien. Perdió la posición con Hamilton en el inicio, misma que no consiguió recuperar, luego, una larguísima parada en boxes casi compromete su posición con Russell. Más adelante perdió tiempo en ese duelo con Sainz, quien de cualquier forma tenía que parar en pits y debía, además, una penalización. Aunque, eso sí, qué bella lucha nos regalaron. Un poco después, la batalla con Russell lo obligó a salir de la pista. No entendí mucho de qué se quejaba Russell, no había otra cosa que Checo pudiera hacer ni debía devolverle la posición, como sí lo hizo, correctamente, con Sainz. Y para cerrar, la confusión en esa relanzada que aprovechó Russell para adelantarlo. Checo luchó hasta el último metro, pero es cierto que todo esto deja un mal sabor de boca. Tiene que volver a encontrarse con su RB18, creo que eso es lo más importante. Reencontrar el balance, el ritmo de carrera y esas décimas que tanto le han costado últimamente. Se sumaron puntos y cada uno de ellos va a resultar sumamente valioso al final. Ahora, hay trabajo por delante.

Y por increíble que parezca, estamos ya a nada de la pausa de verano, a tan solo una carrera. El Hungaroring nos espera en unos días. Hungría escribirá una página más en su historia dentro de la Fórmula 1. Espero que tengamos un inicio menos caótico que el del año pasado. Por lo pronto les digo, nos vemos en Mogyoród.

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