El GP de Sakhir ha sido tremendo, pero no solo la carrera va a ser interesante. El evento de este domingo ha abierto varios melones.
Voy a empezar el post de hoy sin comentar nada de nadie en concreto. Hemos vivido un carrerón. Será por distintos factores, uno de ellos el tipo de circuito. Creo que es la primera vez en mucho tiempo que no ha habido nadie destacado por velocidad y eso ha propiciado el espectáculo, ya que todos los pilotos circulaban juntitos en sus respectivos grupos. Esperemos que la F1 haya estado leyendo el Twitter esta tarde y tome nota de ello. Queremos más carreras así. Igual es pedir demasiado, pero prefiero ver esta modalidad de circuito respecto al normal.
Ahora, si os parece, galería de fotos y nos metemos en harina.
Y hoy quiero empezar con el merecido ganador, Sergio Pérez. Carrera impecable del mexicano. Tras el susto en la salida ha ido labrando la que al final fue su victoria. La primera en su carrera deportiva. Nunca he dudado de la calidad de «Checo» al volante, fuera ya es otra historia. Sergio Pérez hoy nos ha confirmado que con sus habilidades y un buen vehículo, es capaz de lograr victorias. Victoria, por cierto, que también ha sido posible sin Max y los Mercedes peleando por ella, estos últimos por sendos errores y problemas con los neumáticos. Si todo lo que sabemos hasta ahora se confirma, una pena que no participe el año próximo en la Fórmula Uno. Eso sí, pongo esta victoria al lado de la de Gasly en Monza: Aprovechar un cúmulo de circunstancias.
No quiero dejarme a su compañero, Lance Stroll. Ya decía tras el GP de Estiria que el canadiense iba a ser vapuleado por el mexicano. Hoy lo hemos visto de nuevo, Lance ha sido incapaz de adelantar a un Renault. Mucho ha sido que hoy mirara por los retrovisores y no haya tenido ningún accidente, pero se ha pasado de frenada alguna ocasión. Aun así, un podio conseguido.
Sin bajarme del podio, brillante carrera de Esteban Ocon. Si os digo la verdad, no esperaba nada de él este Gran Premio, pero ahí ha estado. Con un buen ritmo, pero lo que le hizo subir al cajón fue la estrategia de una parada. Excelente el francés y el equipo Renault en general. Ricciardo también ha estado genial, pero de los pilotos que han parado dos veces ha sido el segundo, justo detrás de…
…Carlos Sainz. Otra vez, buena carrera del madrileño. No ha sido brutal, pero la salida y su ritmo nos ha hecho soñar con un podio. Ojalá ese pit stop en VSC hubiera salido bien…
Y sí, tantas vueltas en el artículo de hoy para al fin hablar de los Mercedes. Qué decir de la carrera de las flechas negras. Tras la sorpresa a principios de semana con lo de Hamilton. No sé de quién hablar primero. Porque ambos pilotos tienen mucho que comentar hoy.
Pues empiezo con Valtteri, quiero quitarme lo negativo primero. La verdad, estoy muy decepcionado con lo que he visto hoy. Esperaba más. Era el fin de semana de Valtteri para reforzar aquello del «To Whom It May Concern» del pasado GP de Rusia. Y ha fallado estrepitosamente. Una mala salida y dos adelantamientos (el de George y el de Carlos) en un lugar complicado le han agrietado. Por no hablar de lo que ha pasado en la parada, pero eso no lo puede controlar. En resumen con esto, la carrera de Valtteri ha sido mala porque la de los demás ha sido muy buena.
Y hablando de buenas carreras, vamos con la de George Russell. El inesperado sustituto de Hamilton llegó el viernes sin encajar en el coche. Le dolían los hombros y los pies al no caber en el cockpit (Mide más de 1,80 respecto al 1,70 y algo de Hamilton). Yo creo que después de lo de hoy, lo que le duele es otra cosa. Mala suerte con las paradas aparte, lo que hemos visto hoy ha sido antológico y toda una declaración de intenciones. No subió al cajón, pero hoy ha ganado.
En conclusión, me ha gustado ver hoy a otro ganador en esta alocada temporada. El quinto distinto y si no me equivoco, en la temporada con más ganadores distintos desde la introducción de la tecnología híbrida. Hoy hemos visto un montón de cosas y esta carrera va a dar que hablar. La semana que viene traca final en Abu Dhabi, de la cual espero poca cosa, como de costumbre. Desgraciadamente.
