El monegasco logró la pole en país pero se fue con mal sabor de boca por su accidente en el último intento
Charles Leclerc volvió a lograr una pole 2 años después, pero con un sabor agridulce por su golpe en el último intento en la Q3, causando una bandera roja que no ha permitido mejorar a nadie.
«Es una pena terminar contra el muro porque no sientes lo mismo, pero a la vez estoy increíblemente contento por mi vuelta».
«La primera curva ha sido complicada, no lo he hecho bien, pero en el segundo y tercer sector lo he hecho perfecto y estoy contento de conseguir esta pole.»
«Ha sido muy difícil gestionar mentalmente. Después de la segunda tanda me sentía muy emotivo dentro del coche, pero me ha dicho ‘es la Q3 y hay que hacerlo todo perfecto'».
«He conseguido hacerlo, estoy increíblemente contento, pero es mañana cuando se puntúa. «Es una gran sorpresa para todos conseguir esa pole y cuarto lugar para la carrera mañana.»
Sobre una posible rotura en la caja de cambios, que de ser así conllevaría una penalización, Leclerc reconoció: «Estoy preocupado, pero ya veremos.»
