Carlos Sainz volvió a subir a la segunda posición del podio del Gran Premio de Mónaco con Ferrari aunque no parecía del todo contento ya que cree que podría haber ganado pero se vio afectado
Después de que la carrera comenzara con retraso por la lluvia, el madrileño mantuvo la segunda plaza con unas condiciones resbaladizas de pista. Llegó el momento de poner intermedios pero el piloto de Ferrari avisaba por radio que lo ideal era poner directamente un compuesto de seco desde el de lluvia extrema.
Consiguió convencer al equipo y no entrar a colocar intermedios mientras Leclerc, Pérez y Verstappen. Cuando todo el mundo empezó a parar a por los de seco, Sainz también lo hizo pero salió por detrás de Checo, que adelantó con su estrategia de intermedios a Leclerc. Así el piloto de Ferrari volvía a ser segundo.
Y esa fue su posición final ya que tras la resalida después del accidente de Schumacher no fue capaz de adelantar al mexicano. Tras la carrera, el madrileño comentó que cree que su estrategia le hubiera hecho ganar aunque se vio perjudicado por un doblado tras la parada: «Una carrera loca, pero hemos hecho todo lo que teníamos que hacer.»
«Fuimos pacientes con los neumáticos de lluvia, tomamos la decisión correcta al poner los slicks de inmediato. Creo que la vuelta en la que pasamos por detrás de un coche doblado me costó la carrera hoy. Una vuelta de salida limpia me habría garantizado la victoria hoy. Pero salió como salió. A veces este deporte es así.»
«Ya a mitad del primer stint me he dado cuenta de que había una línea seca y que podíamos salir directamente con slicks. Creo que la mía fue la elección correcta. Habríamos liderado la carrera. Pero con esa vuelta de salida tuve que hacer 12 curvas detrás de un coche lento, lo que me costó un par de segundos y la victoria.»
«Pero no quiero quejarme demasiado. Sé que así es este deporte. Checo tuvo mala suerte en Jeddah donde estaba haciendo una gran carrera, aquí me tocó a mí. En este deporte la suerte cambia», comentaba el de Ferrari, que fue preguntado sobre si podía haber atacado a Pérez.
«Yo también tenía mucho graining, sobre todo en las traseras. Eso dificultó la entrada al túnel. Acercarse y pasar era muy difícil. Estuve a punto de intentar una maniobra, pero todavía estaba mojado por dentro y si hubiera frenado más tarde que Checo nos habríamos ido los dos», concluyó Carlos Sainz.
