El de Forlimpopoli no acabó del todo contento tras los días en Sepang, ya que se ve todavía lejos de su mejor rendimiento con la M1
Andrea Dovizioso cumplió la primera pretemporada como piloto oficial de Yamaha. Pues siempre lo hizo como piloto de Ducati y Honda, aunque tuvo varias temporadas con el Yamaha Tech3, pero sin ser piloto oficial. Por lo que el programa de trabajo durante los días de pretemporada es completamente diferente, ya que no tenía un paquete actualizado como ahora, además de ser uno de los pilotos que tiene que desarrollar la moto de Iwata.
«Las sensaciones han sido mejores, pero no en la dirección que yo esperaba. Quizás podría haber hecho una mejor vuelta, pero no tenía la moto bajo control como yo quería para apretar con ella. Intento aprender todo lo posible sobre ella, pero al final me siento limitado, porque aunque sólo nos quedan detalles pequeños, no puedo rendir con la moto como me gustaría. Realmente es todo muy difícil, porque el único que es capaz de marcar la diferencia es Quartararo».
Y es que, tras 8 años con Ducati, el #04 cogió unos vicios con la moto de Borgo Panigale que le está costando soltar y aprender unos nuevos con la M1. Pues son motos de carácter completamente diferente, ya que la primera es un 4V en línea, por lo que la entrega de potencia es más agresiva, mientras que una 4 en línea, provoca que la entrega sea más dulce, por ende, tenga que realizar una conducción diferente.
«Fabio ya demostró el año pasado que puede ser muy competitivo con la M1, pero como dije antes, cada moto tiene unas características distintas a las demás. Ahora mismo la situación es inusual, porque si piloto como lo hago habitualmente, todo se complica»
A pesar de no dar con la tecla para ir rápido con la Yamaha, el del WithU sabe que aún tiene que trabajar para dar con la tecla, ya que para él, las bases de la M1 son cuanto menos sólidas.
«Creo que la base de la M1 es sólida, pero hay algunas áreas un poco extrañas como el chasis en las que debemos concentrarnos. Hasta que no logremos dar un paso en ese sentido será complicado, porque el único capaz de llevar esta moto con un estilo concreto es Quartararo, no hay otras opciones. De momento soy incapaz de pilotar la M1 como Fabio, creo que es evidente».
Finalmente, tras las sensaciones obtenidas en los test de Sepang, está deseando comenzar los de Mandalika, ya que estos le darán más información de donde puede estar en el comienzo de la temporada.
«Estoy feliz por intentarlo en otra pista, aunque no sé cómo nos irá. Hemos trabajado muy bien con los ingenieros, les ha transmitido toda mi información de un modo directo y claro. Tengo claro cuáles son las características de la Yamaha, pero me va a llevar tiempo. No sé si podremos solucionarlo todo durante el próximo test».
