El doble campeón del mundo derrotó a Sébastien Loeb en la final cara a cara. Sainz obtuvo el 57,28 por ciento de los votos en un reñido y último envite.
La competición capturó la imaginación de los aficionados al rally en todo el mundo con más de 80.000 votos emitidos en la final. En total, más de 300.000 votos fueron emitidos durante el torneo de un mes de duración, organizado por el promotor del WRC y apoyado por Pirelli.
«No puedo estar más feliz y orgulloso de este reconocimiento», dijo Sainz, de 58 años, a los aficionados. «Muchas gracias por traerme primero a la final y, por supuesto, en segundo lugar por permitirme ganar este reconocimiento contra Sébastien Loeb.
«No necesito decirles cuánto valoro a Sébastien Loeb y cuánto merece ser el más grande. Pero tengo que decir que no sólo él, todos los campeones del mundo merecen este reconocimiento. Pero alguien tiene que ganar y, en este caso, he sido yo mismo».
«Dí todo por el rally. El rally ha sido mi vida, el rally ha sido mi sueño y hoy en día el rally y toda la familia del rally me está dando una gran sonrisa y este gran reconocimiento», añadió.
Sainz, apodado El Matador, ganó el título mundial de pilotos en 1990 y 1992 con Toyota y obtuvo 26 victorias en el WRC de 196 inicios de carrera. Fue uno de los más constantes en el WRC y también terminó segundo o tercero en el campeonato en nueve ocasiones.
Estuvo en el podio en casi la mitad de los rallyes que comenzó y fue reconocido por su atención a los detalles y la preparación previa al evento.
Los 18 campeones desde la introducción del título de pilotos del WRC en 1979 se unieron a la competición con dos entradas como comodines.
El sorteo de los torneos llevó a los pilotos a batallas cara a cara. Cada día, los aficionados y un panel de periodistas expertos votaron por su favorito de cada pareja.
El sexto cabeza de serie Sainz derrotó a Hannu Mikkola en la primera ronda de la competición antes de derribar al tercer clasificado Tommi Mäkinen. Luego venció al seis veces campeón Sébastien Ogier, segundo cabeza de serie, en la semifinal.
Loeb, nueve veces campeón del mundo y primer cabeza de serie, eclipsó a Richard Burns y Walter Röhrl en las primeras rondas. Luego derrotó al finlandés volante Juha Kankkunen en la semifinal.
El panel de seis periodistas expertos no pudo dividir a los dos pilotos en la final ya que cada uno obtuvo tres votos. Significaba que la decisión final recaía en los aficionados y la increíble popularidad de Sainz lo llevó a la victoria.
El panel de periodistas estaba compuesto por Julian Porter (comentarista y locutor del WRC), Marco Giordo (revista Autosprint, Italia), Reiner Kuhn (Motorsport aktuell, Alemania), David Evans (DirtFish, EE.UU.), Loic Rocci (AUTOhebdo, Francia) y José Manuel González (comentarista del WRC+ All Live, España).
El director gerente de la promotora de WRC, Oliver Ciesla, se quedó boquiabierto por la gran respuesta de la competencia.
«En primer lugar, mis felicitaciones a Carlos por añadir el título de el mejor piloto de WRC a sus numerosos logros», dijo.
«Ya era una leyenda del WRC gracias a sus increíbles habilidades de conducción en el terreno más brutalmente duro e implacable del planeta». Este galardón confirma la admiración que le tienen tanto los fans como los expertos. Se le conoce como el Rey Carlos, ¡ahora es oficialmente el Rey del WRC!»
«Sébastien es estadísticamente el piloto más exitoso en la historia del WRC. Pero queríamos que los fans pensaran más allá de los números para elegir a su mejor piloto».
«La popularidad de esta competición superó con creces nuestras esperanzas. Queríamos que proporcionara algo de diversión a nuestros fans cuando no hay acción del WRC, pero su popularidad creció y creció a través de los medios de comunicación. Recibir más de 300.000 votos es notable, un gran agradecimiento a todos los que participaron», añadió Ciesla.
