Jorge Lorenzo recuerda una de las carreras más emblemáticas de la histórica con Valentino Rossi, Barcelona 2009. Cuenta su punto de vista y explica por qué no ganó, quedándose así detrás de su antiguo compañero de equipo.
Jorge Lorenzo y Valentino Rossi, dos nombres que cuentan la historia de una parte del MotoGP moderno. Si ahora son «aliados» para poder desarrollar una Yamaha que pueda contrarrestar la abrumadora potencia de Marc Márquez con Honda, una vez fueron rivales. Aunque compartían el box, la competencia entre los dos (ahora ex) compañeros de equipo era muy alta, tanto dentro como fuera de la pista.
El emblema de la rivalidad entre Rossi y Lorenzo es el Gran Premio de Cataluña 2009. La carrera de Barcelona fue una de las más bellas de la historia por el duelo entre las dos que encendió las últimas vueltas y por un espectacular adelantamiento del entonces campeón del mundo en la última curva.
Il Dottore fue más listo que el piloto el español en la última vuelta, adelantándolo en un punto virtualmente imposible. Ese adelantamiento quedó en la historia (como muchos de los de Valentino Rossi) y, once años después, muchos recuerdan esa carrera como una de las mejores de la historia. En una entrevista con el programa «Greatest Races» de BT Sports, Jorge Lorenzo revive ese domingo y cuenta su punto de vista.
«Parte de mí no esperaba esa maniobra, pero parte de mí sí», dijo el ex piloto de MotoGP.
«Pero en ese momento fui demasiado terco para intentar cerrar la puerta. Tenía un poco de miedo de hacerlo y mantuve la misma trayectoria que tuve durante toda la carrera. Por eso no sabía realmente qué hacer y él se aprovechó de ello. Si recuerdas, también ocurrió dos años antes con Casey Stoner en 2007. Así que sabía que podía hacer ese movimiento porque lo había hecho antes. Lo repitió y perdí la victoria».
Posteriormente admite que la experiencia y las diferentes fortalezas de los pilotos jugaron un papel clave en ese momento: «Tenía 22 años en ese momento, no tenía la experiencia que tengo hoy. Valentino tenía casi 30 años y tenía mucha experiencia a sus espaldas. Afrontémoslo, siempre fue mejor que yo, incluso en circunstancias normales. Sólo comprendí cómo frenar muy tarde cuando fui a Ducati, pero durante el período de Yamaha él frenaba más fuerte que yo, así que también se aprovechó de eso. Era mucho más fuerte en la velocidad de la curva que en la frenada. Pero tenía esta ventaja y la aprovechó. ¿Qué habría pasado si hubiera entrado en las curvas unos metros más adentro? Nunca lo sabremos, pero probablemente me habría ahorrado el adelantamiento y ganado. O tal vez habría hecho una línea diferente a lo largo de toda la carrera, habría ido por fuera y me habría devuelto el adelantamiento por dentro. Quién sabe.
Entre adelantamientos y declaraciones, Rossi y Lorenzo han incendiado las temporadas de MotoGP desde 2008, año del debut del español en la categoría reina: «Cuando pasé de 250cc a MotoGP fui muy irreverente fuera pero también dentro de la pista. Quería todo de inmediato y pensé que todo era posible. No tenía límites en mi cabeza. En mi primer año en MotoGP, en 2008, tuve neumáticos Michelin. En las primeras tres o cuatro carreras fueron increíbles, me sentí cómodo en la moto y sentí que no tenía límites.»
«Con mi talento, una moto y neumáticos de competición, llegué a la primera clase, conseguí la pole en la primera carrera y la repetí en la segunda. En la tercera carrera gané, así que no me asusté de nada. Lo dije públicamente y alguien lo tomó por arrogancia. Podría haber sido un poco arrogante tal vez, porque dije que no tenía ningún ídolo y no creía que Valentino era un ídolo para mí. Seguramente sus fans, y el público en general, no se lo tomaron bien, porque no estaban acostumbrados a escuchar estas declaraciones. Pero eso es lo que pensé, en mi cabeza no había límites. También por eso pude obtener resultados extraordinarios. Pero los accidentes en China, Le Mans y Mugello cambiaron un poco mi punto de vista y me hicieron volver con los pies en la tierra».
Barcelona quedará grabada en la mente de muchos aficionados durante mucho tiempo: «No digo esto porque lo haya experimentado personalmente al estar involucrado en la lucha, pero si tanta gente dice que la carrera fue espectacular al verla es también porque nuestro nivel era tan similar en el momento del campeonato que el ganador de esa carrera habría sido crucial para el desarrollo del campeonato a partir de ese día. Desafortunadamente para mí, perdí la carrera, afortunadamente para Valentino, ganó. Esto cambió un poco el curso del campeonato, porque Valentino había comenzado bien con buenos puntos. Pero más adelante en Le Mans, Rossi se fue al suelo y yo gané».
«Llegamos a Montmeló casi en igualdad de puntos y Casey estuvo cerca. Pero empezó a cometer algunos errores y perdió muchos puntos después de la carrera. En la misma moto, Valentino y yo hicimos tiempos similares en cada sesión, así que cuando llegamos a la carrera nadie podía escaparse o tomar un margen en términos de segundos. Traté de empujar pero no pude escaparme, lo mismo para Valentino. La única forma de saber quién sería el ganador era esperar a la última curva».
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Lorem fistrum por la gloria de mi madre esse jarl aliqua llevame al sircoo. De la pradera ullamco qué dise usteer está la cosa muy malar.
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