Carmelo Ezpeleta, director general de Dorna, dice que quiere recibir a Jorge Lorenzo con los brazos abiertos, después de la confirmación de su participación en el Gran Premio de Cataluña.
Dos horas después de que Dorna anunciara la nueva versión del calendario mundial establecido a raíz de la emergencia del coronavirus, Jorge Lorenzo ha confirmado a través de sus canales sociales su participación en el próximo Gran Premio de Cataluña, que se celebrará el 7 de junio en Montmeló, como wild card con Yamaha.
Esta será su reaparición después de que anunciara su retiro a mediados de noviembre del año pasado al final de su peor temporada en MotoGP. La negativa de 2019 lo llevó a romper su contrato de dos años con Honda antes de finales de 2020.
A principios de año, el mallorquín aceptó la oferta de Yamaha de convertirse en piloto de pruebas. Su primera prueba fue el shakedown de Sepang de MotoGP hace poco más de un mes y debería volver a la moto en unos días, pero esta vez con una prueba privada en Japón.
«El regreso de Lorenzo es algo bueno, una buena noticia. Espero que vaya bien. Me despedí de él el año pasado, pero estoy feliz de darle la bienvenida de nuevo», dice Carmelo Ezpeleta de Losail, donde sólo corren Moto3 y Moto2 este fin de semana.
El director general de Dorna fue uno de los más honestos y directos cuando se le preguntó en la última fase de la temporada pasada qué pensaba del momento negativo de Lorenzo, sumergido por las dudas que finalmente le llevaron a colgar el casco.
«Jorge tiene que empezar a pensar en si puede recuperarse y volver a ser lo que conocemos o no. Básicamente para él y para el campeonato. No me gusta ver a un corredor como él terminar en la 19ª posición», dijo Ezpeleta.
En este punto, habrá que ver en qué condiciones llega Lorenzo a la cita de Montmeló, lo que le servirá para minimizar los efectos de la falta de kilómetros en un prototipo de ModoGP. También aprovechará los cinco o seis entrenamientos previos a la carrera del domingo para ver hasta dónde puede llegar.
