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Rara vez se puede ver como la logística del mundial de motociclismo sufre demoras importantes. Pues en esta ocasión, el problema fue tan grande que la actividad en pista del viernes se vio cancelada por ello

Tras conocer que la cita Argentina tendrá que esperar unas horas más antes de poder realizarla sin problemas, Carmelo Ezpeleta tuvo que salir al paso al tener semejantes problemas. Pues nunca antes se había visto un problema logístico de semejante envergadura, por lo que la situación es bastante crítica, ya que esto mancha la imagen del campeonato.

«Hace dos semanas estuvimos en Lombok, todo estaba bien programado porque teníamos una semana de por medio. El pasado miércoles mandamos varios vuelos desde Lombok rumbo a Argentina, y uno de ellos tuvo un problema en Mombasa. Tomamos la decisión de que uno de los vuelos que ya habían llegado a Argentina volviera a Mombasa, y tuvimos la mala suerte de que también se averió otra vez allí. La idea era que el material llegara hoy, pero el problema se ha ido haciendo más grande. Al parecer el problema está en las válvulas de uno de los cuatro motores. Teóricamente, las válvulas (nuevas) están llegando a Mombasa en este momento procedentes de Londres y París, para que puedan reparar el avión esta tarde, y si todo va bien, el vuelo debería llegar esta tarde aquí sobre las 20:00 para poder seguir con el nuevo programa del sábado. Si el vuelo llega hoy a las 20:00, todo irá bien».

A pesar de haber conseguido solventar los problemas más críticos en los últimos años, cuando hubo la explosión de Covid. Esta vez no fue así, pues de forma indirecta, la guerra abierta entre Rusia y Ucrania está afectando más de lo deseado a nivel de vuelos.

«Durante estos 30 años nos hemos dado cuenta de que la situación de los vuelos de transporte es compleja, el mayor problema y que se ha ido agrandando con la guerra de Ucrania es que muchos de los vuelos de transporte son operados por empresas rusas, y todos estos vuelos están ahora prohibidos. Se han perdido el 20% de los vuelos de carga en todo el mundo. El problema es que ahora mismo no hay más vuelos disponibles, los llevamos buscando desde el miércoles de la semana pasada hasta ahora. No queda otra solución que esperar a que reparen las válvulas del avión que está en Mombasa y que llegue aquí».

Aún así, el CEO de Dorna, se muestra tranquilo al saber que este percance no afecta a las próximas citas del campeonato, ya que la programación por el momento no se vio afecta.

«Quizás tendremos que reconsiderarlo más en el futuro cuando sean carreras consecutivas, pero esta vez teníamos una semana de por medio. Por desgracia no podemos solucionar la situación. Este será el gran premio número 499 que organizamos, por suerte es la primera vez que nos ocurre esto, y considerando la situación global, es bueno que estemos preparados para aceptar cosas así. Nuestro objetivo es hacer la carrera aquí en Argentina, y luego ir a EEUU».

Y es que, uno de los problemas existentes es las múltiples sanciones a las empresas rusas, pues estás sanciones vienen provocadas al ver que su líder, no ceja en el intento de invadir Ucrania. Por lo que hay menos aviones que antes.

«Al parecer, tampoco estoy seguro de si la cifra es exacta, sólo hay 140 aviones de carga en todo el mundo, entre otras cosas porque a nosotros no nos sirve cualquier avión de carga. Ahora sólo nos queda hacer el mejor esfuerzo posible para solucionar la situación, pero tenemos que aceptar lo que está ocurriendo, es parte del juego».

Aunque en verdad, lo que más afecto fue el percance en Mombasa, ya que el avión se averió y trajo consigo los consiguientes problemas.

«Faltan algunos neumáticos, también están afectados Gresini y VR46, también Ducati… y hay más. Lo que está claro es que todos deben tener las mismas oportunidades. No quedaba otra que retrasarlo todo».

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