El piloto de Aprilia está convencido de que ha dado un paso importante frente a Jerez en los test de Misano. La RS-GP confirma los buenos indicios del invierno
Una primera toma de contacto de vuelta a la normalidad, aunque con todas las precauciones dictadas por la emergencia de COVID-19, vio a Aprilia volver a la pista durante tres días de test en Misano.
Mientras esperaban reanudar un Campeonato Mundial que nunca había comenzado oficialmente, Aleix Espargaro y Bradley Smith compartieron la pista de Romagna con algunos de los protagonistas del MotoGP y los derivados de la producción (WSBK).
Entre ellos Lorenzo Savadori, que primero participó en el desarrollo de la RSV4 1100 que utilizará en el Campeonato Italiano y posteriormente subiría a la RS-GP 2019 durante el tercer y último día.
Una serie de pruebas fundamentales, tanto para reanudar el hilo técnico interrumpido después de Qatar como para dar a los corredores la oportunidad de prepararse físicamente para un calendario apretado, que los verá ocupados de julio a noviembre con muy pocas paradas.
Todo esto bajo el sol del verano en Misano, lo que les permitió aprovechar al máximo el tiempo disponible, pero aún así puso a prueba la resistencia de los pilotos y técnicos.
Al final de los tres días, la mejor vuelta de las 183 dadas por Aleix fue un 1’32″932, el más rápido de los pilotos en la pista. 207 vueltas para Bradley Smith, quien reemplazará a Andrea Iannone durante las primeras carreras del calendario, con un mejor tiempo de 1’33″536.
«Después de una parada tan larga fue emocionante volver a la pista y ya tengo ganas de ir a Jerez para las dos primeras carreras. Para nosotros es fundamental montar mucho, tenemos una moto completamente nueva que, aunque nace con un gran potencial, necesita kilómetros. También sabemos que Misano no es nuestra pista favorita, pero a pesar de ello al final de los tres días logramos alcanzar un buen ritmo, confirmando las impresiones positivas que tuve en Malasia y Qatar», dijo Aleix Espargaró.
«Honestamente estoy feliz al final de estos test. Tuve que dar un paso físico y mental para ir de piloto de pruebas a piloto y creo que lo he conseguido, especialmente en este último día. Para nosotros ahora mismo es crucial experimentar esta nueva moto, recoger datos y entender las reacciones. Si la configuración básica demostró ser buena en Malasia y Qatar, todavía hay muchos aspectos que debemos explorar para explotar todo el potencial del nuevo proyecto. Por mi parte, sé que todavía tengo algo de margen, el rendimiento de Aleix lo demuestra, pero la diferencia se ha reducido y me siento mucho más cómodo llevando al límite la RS-GP 2020», añadió Bradley Smith.
«Estas fueron pruebas importantes para definir el punto de partida de nuestro campeonato. Evaluamos las diferentes soluciones de chasis, motor y electrónica, así como la reconstrucción de un equipo que es nuevo en muchos sentidos. Los pilotos también necesitaban esta prueba para coger el ritmo después de una parada tan larga y tengo que decir que los he visto crecer día tras día. Las decisiones que se toman antes de Jerez, muchas de las cosas nuevas que hemos preparado han demostrado que funcionan y estoy bastante contento con el nivel general que muestra la moto. Todavía tenemos mucho trabajo por delante en los detalles, especialmente para aumentar la fiabilidad general. Lo decimos todos los años pero no está mal hacerlo: el nivel del campeonato ha subido aún más y esto nos empuja a hacer un esfuerzo mayor», concluyó el director técnico Romano Albesiano.
