El actual campeón del GT Open lo tiene claro, y apunta a Le Mans. Actualmente se encuentra en disputando dos campeonatos: GT World Challenge Europe y ADAC GT Masters.
Albert Costa Balboa, barcelonés nacido en Mayo de 1990, es el vigente campeón del International GT Open. Albert viene de familia con tradición en deportes de motor, ya que su padre, Luís Costa Rey, llegó a proclamarse campeón de España en 250cc., no siendo el único en su familia, ya que su hermano mayor, Lluís Costa, llegó a disputar en la categoría de 250cc. del Campeonato del Mundo de Motociclismo.
Albert comenzó a coquetear con el mundo del motor, y desde bien pequeño, quiso meter la cabeza probando motos en casa, época donde fue adquiriendo experiencia gracias a su hermano Lluís, que le enseñaba ténicas. No obstante, Albert al final se decantó por las cuatro ruedas y no por las motos.
Costa empezó en el Karting gracias a una invitación del padre de Jaime Alguersuari, a finales del año 2000, que le llevó a disputar y ganar el conocido “Trofeo Marc Gené”. Tras este triunfo, fue cuando Albert se dio cuenta de lo que quería: correr. Desde entonces, ha ido creciendo y creciendo, eso sí, con piedras en el camino, pero que le han hecho situarse con el paso de los años, como referencia dentro de la categoría GT. Hoy día, con el campeonato del GT Open bajo el brazo, quiere más y se encuentra disputando el GT World Challenge y el ADAC GT Masters.
Hemos tenido la ocasión de estar con él, y no has contado un poco más sobre él:
Pregunta: Cuéntanos un poco sobre ti mismo, ¿Quién es Albert Costa?
Respuesta: Un chico normal, que lucha por lo que más le gusta que es correr. Me considero un chico normal, el mismo que en los circuitos, por lo que me considero cercano y simpático. Amigo de mis amigos, incluso cada vez más. Eso sí, con mi punto de locura. Soy también una persona a la que le gusta tenerlo todo bajo control y todo ordenado; esto implica, tanto vida deportiva como privada. Para mí la estabilidad, es lo que en parte, también me ayuda a conseguir resultados.
P: ¿Y Albert dentro de la pista? ¿Podrías definir tu conducción en dos palabras?
R: Siempre me he considerado un chico fino y tranquilo al volante. Sin embargo, los que me rodean me definen al volante como agresivo e innato.
P: Siendo tú alguien agresivo, ¿quién ha sido hasta la fecha el compañero más difícil?
R: Yo diría que Franck Perera (ADAC GT Masters – Grasser Racing Team) hasta la fecha. Es un piloto completísimo, que ha pilotado tanto en F1 para Toyota, así como en la ChampCar e Indy Lights. Además es muy constante. Esto es un reto para mí, aunque hasta la fecha le he batido en casi todas las sesiones.
P: ¿Cómo es tu preparación previa a una carrera? ¿Sigues algún entreno específico?
R: No tengo un ritual exacto, pero si me gusta estar tranquilo, hidratarme y guardar fuerzas. Algo que también hago, es estudiar la parrilla, tanto a quién tengo por delante y quien por atrás. Basicamente intento tener todo lo más controlado que pueda, o que al menos esté en mi mano. Las estrategias de parada es algo que también intento estudiarme, además de las posibles variaciones que puedan haber que son discutidas previamente con los ingenieros. Una vez en el coche, tienes que tener la cabeza fría y saber cómo actuar.
P: Actualmente te encuentras en el 6° lugar de la general del ADAC GT Masters, así como en el 11° en el GT World Challenge. ¿Qué sensaciones hay para lo que resta de temporada?
R: En ADAC GT Masters restan 3 carreras, que son Sachsenring, Red Bull Ring y Oschersleben, y ninguna nos favorece sobre el papel. En cambio, en GT World quedan Spa, Barcelona y Paul Ricard. Diría que la que mejor pinta es Barcelona, aunque como digo, es sobre el papel. Todo puede cambiar.
P: ¿Cuáles eran tus expectativas al comienzo de la temporada y cómo son ahora?
R: Mis expectativas eran ganar el ADAC GT Masters, pero en las últimas carreras estamos fallando más de lo normal. Por tanto, el campeonato se está poniendo un poco cuesta arriba. Además, como ya he comentado, las carreras que siguen, no son favorables para nosotros. En cambio, en el GT World no vamos tan finos, pero era algo que ya sabíamos. De todas formas, cada carrera que hacemos, lo damos todo, y así es como vienen buenos resultados.
P: Llevas dos temporadas compitiendo en dos temporadas simultáneamente. En las anteriores siempre con Emil Frey Racing, en cambio, Grasser Racing en ADAC es nuevo. ¿Cómo te sientes con ellos?
R: No se pueden comparar. Grasser es como más tranquilo todo, se encaran las carreras con otra perspectiva, e incluso hay un ambiente más distendido. Emil Frey tienen una cultura más suiza, donde predomina otros factores. En definitiva, son más estrictos. En término de coche es lo mismo, porque tanto para uno como para otros, corremos con Lamborghini; lo único que cambia son los circuitos.
P: Se acercan las pruebas de resistencia como las 24h de Spa. ¿Cómo te preparas para unas 24 horas?
R: Bueno, en una situación sin Covid, la verdad es que entreno mucho más la resistencia por ejemplo a base de ciclismo. El Covid lo ha complicado un poco todo, ya que ahora estoy en un “periplo” de 11 fines de semana sin pausa. Lo que si intento es cuidarme al máximo la alimentación, ya que intento que lo que queme me de energía. Así que alimentación y descanso sobre todo ahora, y cuando estoy un par de días por casa, combino cilcismo y giimnasio.
P: ¿Has tenido la oportunidad de correr las 24h de Le Mans?
R: No, aún no. Este año hemos estado muy cerca, pero no ha podido ser. Mi nombre ha sonado, lo que pasa que por temas comerciales no ha podido ser. De todas formas, mi objetivo próximo son las 24h de Le Mans, así que para el año que viene, a lo mejor me veis corriendo allí.
P: Le Mans es objetivo para el año que viene. A parte de la gran cita, ¿qué más nos depara Albert Costa en 2021?
R: En principio no debe de haber mucho cambio. Todo indica que estaré de nuevo el GT World Challenge así como en ADAC GT Masters, aunque no está nada cerrado. Idealmente el próximo paso sería algo como el Intercontinental GT Challenge, junto con Le Mans y Daytona, aunque estamos trabajando para ello. Será cuestión de tiempo.
P: ¿Por qué turismos y no monoplazas?
R: Bueno, mi historia no es que haya sido un paseo de rosas. Me quedé sin nada, y he estado parado 4 años y eso ha ido en mi contra. Me gustaría estar en F1 o IndyCar haciéndolo bien, pero las circunstacias son las que fueron, y estoy más que agradecido de poder estar compitiendo ahora en dos campeonatos. De esta historia, lo que sí te puedo decir es que sabes valorar lo que tienes, y esto me ha hecho tener los pies en el suelo. No me puedo quejar de lo conseguido hasta ahora: soy piloto oficial de Lamborghini y soy el campeón vigente del GT Open.
P: ¿Cuál es tu mejor victoria hasta la fecha?
R: El año pasado, en la última cita del Blancpain GT, en Montmeló. Llegué para ayudar, y me llevé la victoria. Fue una victoria especial, sobre todo porque corrí delante de mi gente.
P: Y por último Albert, ¿de qué error has aprendido más?
R: No ha habido un error en sí que me haya hecho aprender. Simplemente no he sido un piloto de hacer un gran error, aunque quizá suene prepotente. He hecho algún pequeño error, como por ejemplo hace unas semanas en MagnyCours, cuando me toqué con un rival y me penalizaron; o por ejemplo, en Imola, esta temporada, que me fui contra el muro en los libres. Son pequeños errores, que de alguna forma me hacen evitar uno grande, puesto que de cada uno intento aprender y poder equilibrar al piloto que soy.
