El presidente de la FIA reconoce que el deporte del motor se enfrenta a una nueva realidad y por tanto, requiere un nuevo enfoque como resultado de la pandemia del coronavirus.
El francés es consciente de que los costes de la F1 «siguen siendo una locura» y que será necesario reducirlos aún más para asegurar la supervivencia de los equipos y del deporte. También tiene claro que el deporte del motor, y en particular la Fórmula 1, tendrá que ser reajustado en lo que él describe como un «nuevo acuerdo».
«No creo que la prioridad número uno ahora para un fabricante sea asegurar la continuidad en las carreras de motor», dijo. «Espero que todos se queden. Por eso debemos escuchar a todos.»
«Incluso los grandes, nunca debes dar nada por sentado. Así que debemos considerar todo y ser humildes; nos encanta el deporte del motor, pero no es esencial para la sociedad. Debemos asegurarnos de que tomamos las decisiones adecuadas, las decisiones apropiadas. Llevará algún tiempo, volverá, y espero que vuelva mejor.»
Todt dijo que la FIA debía asumir la responsabilidad de motivar a los equipos para que se comprometieran a permanecer, e insistió en que no había ninguna complacencia por parte del órgano rector sobre lo difícil que era la situación.
«Estoy seguro de que muchos equipos, proveedores, fabricantes, pueden tener que revisar sus programas», añadió. «Pueden verse obligados a detenerse.»
«No quiero tener demasiada confianza, pero espero que unos pocos propietarios o patrocinadores de equipos mantengan la motivación. Por eso debemos asegurarnos de no desanimarlos, porque pueden decir: «Bien, después de todo eso, ¿cuál es el propósito? ¿Me sigue gustando? ¿Todavía lo necesito?, a si que debemos animarlos para asegurarnos de que todavía les gusta y que todavía lo necesitan. En eso, tenemos una responsabilidad.»
La pregunta clave a la que se enfrentan todos los deportistas es cuándo se puede reiniciar la carrera. Esta semana la F1 pospuso su novena carrera, el Gran Premio de Canadá, unos 65 días antes del evento.
Sin embargo, Todt comparte el optimismo del CEO de la F1, Chase Carey, de que un calendario significativo será posible una vez que se levanten los cierres.
«Una vez que sepamos que podemos empezar, creo que realmente podríamos ver dos o tres grandes premios al mes», dijo. Si empezamos en julio/agosto y vamos a diciembre, tenemos seis meses, de cinco a seis meses, multiplicados por tres.»
Indicó que todas las opciones posibles están sobre la mesa para ser consideradas cuando se reconstruya un nuevo calendario de F1 una vez que el camino esté despejado para reiniciar. Esto incluye un calendario completamente nuevo de fechas y circuitos, y las carreras a puertas cerradas, al menos inicialmente, pero minimizó la posibilidad de que la temporada se extienda hasta el 2021.
«Es algo que se ha discutido y está en manos de los titulares de los derechos comerciales, que podrían tener algunos contratos comerciales», añadió. «Quiero decir que para nosotros, como órgano de gobierno, es sólo la decisión de decir sí o decir no, pero no parece probable».
Antes de una nueva reunión de jefes de equipo de la F1 el viernes para discutir la reducción del límite presupuestario de la F1 para ayudar a asegurar la supervivencia de los equipos, Todt dijo que la crisis del coronavirus ofrecía una oportunidad para mejorar el futuro. Por eso percibió una oportunidad para que la F1 se aleje de los presupuestos tan altos, y se mueva hacia niveles más sostenibles.
«En cada desastre, en cada crisis, tienes mucho de malo pero tienes algo de bueno», dijo.
«Así que, entre lo bueno está que tenemos la oportunidad de hacer las cosas mejor para el futuro. Y principalmente en la Fórmula 1, llegamos a algunos niveles de gastos que para mí no son razonables y que tenemos que abordar».
