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El director técnico de Racing Point, Andrew Green, insiste en que la decisión de parar en boxes a Sergio Pérez al final del GP de Emilia Romagna fue la correcta

La última parada le costó a Pérez un tercer lugar que ocupaba en ese momenot, y lo dejó lamentado tras cruzar la línea en sexto lugar. Checo comenzó desde el 11º lugar de la parrilla, y había gestionado muy bien los neumáticos blandos para escalar hasta la cuarta posición, antes de cambiar a los neumáticos duros para, en principio, ir con ellos hasta el final.

Cuando el abandono por un reventón en la rueda trasera izquierda de Max Verstappen provocó un coche de seguridad, al Racing Point le preocupó que Pérez tuviera problemas para calentar los neumáticos duros en la reanudación, debido a las mismas características que le habían ido tan bien en la primera parte de la carrera. Por lo tanto, se le pidió que entrase para montar un juego nuevo de blandos. Sin embargo, los tres pilotos inmediatamente detrás de él, Daniel Ricciardo, Charles Leclerc y Alex Albon, se quedaron en pista y por tanto delante de él, dejándolo así en sexto lugar para la reanudación.

Cuando la bandera verde ondeó, Pérez perdió otro lugar con Daniil Kvyat, que también estaba con neumáticos nuevos. Después logró pasar a Albon con una gran maniobra, pero en las vueltas restantes no pudo hacer nada con Leclerc, y tuvo que conformarse con el sexto lugar. Después, Green dijo que la forma en que el coche protegió sus neumáticos provocó la preocupación por la reanudación.

Sergio Perez, Racing Point RP20, leads Esteban Ocon, Renault R.S.20

«La carrera iba completamente en nuestra dirección», dijo Green. «Hastael coche de seguridad, Checo había hecho todo perfecto, con un gran ritmo, escalando hasta el cuarto lugar. Superó al pelotón yendo más tiempo con los neumáticos medios , los gestionó muy bien, el coche estaba muy bien, por lo que estábamos muy contentos con el rumbo que tomaba».

«Y el peor escenario posible era un coche de seguridad. Y no era realmente para lo que estábamos preparados, por desgracia. Siempre iba a ser una decisión difícil. Estábamos con los neumáticos duros, porque estábamos listos para hacer el segundo stint hasta el final, pero estábamos increíblemente nerviosos por tener que volver a calentar los neumáticos duros detrás del coche de seguridad, y creo que habríamos tenido problemas».

«Así que pensamos que lo más lógico era cambiarlo por un juego de blandos, para no tener que preocuparnos por eso. Pensamos que otras pilotos podrían hacer lo mismo, pero dependía mucho de cómo se prepararon para la carrera. Y creo que probablemente sólo mostró dónde estaba nuestro ritmo de carrera, porque habíamos preparado el coche para cuidar los neumáticos y no sobrecalentarlos. Íbamos a luchar detrás del coche de seguridad en esa situación.»

Green dijo que la situación empeoró para Pérez cuando George Russell se estrelló detrás del coche de seguridad, extendiendo el Safety Car unas vueltas más, y quitando vueltas para atacar con neumáticos blandos.

«Y luego tuvimos más complicaciones con un segundo incidente detrás del coche de seguridad. No podíamos haber previsto ese. Así que el número de vueltas restantes para adelantar se redujo de nuevo, por un margen considerable, y eso nos perjudicó. En retrospectiva, habríamos tomado una decisión diferente. Pero creo que en ese momento, con la información que teníamos, esa fue la decisión a la que llegamos.»

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