Toto Wolff podría dejar Mercedes para convertirse en el nuevo CEO y Accionista de Aston Marin. Las negociaciones con Lawrence Stroll, recién estrenado en su cargo, están tomando forma.
Durante la crisis del coronavirus, las carreras de Fórmula 1 se han suspendido, pero entre bastidores del Gran Circo la actividad sigue. Según información de ‘Motorsport-Total.com’, el exitoso jefe de equipo de Mercedes es una parte central de una iniciativa de inversión financiera que quiere unirse al fabricante de coches deportivos británico.
Relación cercana: Lawrence Stroll podría llevar a Toto Wolff al Aston Martin
Los rumores de que Wolff podría dejar Mercedes circulan desde enero. El 19 de marzo el «Daily Mail» británico informaba, entre otras cosas, que Wolff había volado de regreso de Australia junto con Lawrence Stroll, el principal accionista de Aston Martin. Mercedes no confirma esta información. No se comentan los temas comentados en viajes privados, dicen.
Ya el 16 de enero ‘F1-Insider.com’ ya comentaba en el artículo «Se harán cargo Wolff y Stroll del equipo Mercedes?» que Wolff «podría conseguir el puesto de CEO de Aston Martin». Eso fue 15 días antes del anuncio oficial de que Stroll había comprado Aston Martin.
Stroll & Wolff: La relación se remonta a años atrás
No es un secreto en los círculos de la industria que Wolff y Stroll se conocen y aprecian. La relación comercial entre los dos se remonta a mucho tiempo atrás. Cuando Force India fue enviada a la insolvencia en el verano de 2018, Wolff fue uno de los que tiraba de las cuerdas entre bastidores. Inevitablemente también porque Mercedes, como proveedor de motores, era uno de los principales acreedores del equipo.
Y cuando Stroll se preparaba para unirse a Aston Martin a finales de 2019, Wolff fue uno de los facilitadores, según confirman varias fuentes. Después del Gran Premio de México, Wolff y Stroll volaron juntos en su jet privado a Nueva York. Allí se negociaron los detalles de la financiación del acuerdo Stroll-Aston en un bufete de abogados.
El hecho es que el contrato de Wolff como jefe del equipo de Mercedes expira a finales de 2020. Y si el Grupo Daimler, que ya había lanzado un programa de ahorro multimillonario antes de la crisis económica del coronavirus, no se asegura la continuidad del equipo multicampeón en Fórmula Uno.
En la actualidad, casi nadie puede evaluar seriamente los efectos a largo plazo de la crisis en la industria automotriz. Además, hace tiempo que se rumorea en círculos internos que el CEO de Daimler, Ola Källenius, no es un fanático de Wolff. En el mejor de los casos, la relación entre los dos se describe como una relación de propósito más que de amor.
No es un secreto que hay grietas entre la cúpula de Daimler y el jefe de equipo en Fórmula Uno. Esta situación se ha puesto de manifiesto recientemente con la denuncia de los equipos a la FIA por el caso del «Ferrarigate».
Källenius y Wolff: Una relación complicada
El fin de semana en Melbourne se filtró que hubo un roce entre Källenius y Wolff. El jefe de Daimler había concertado una cita con el presidente de Ferrari, John Elkann, y accedió a dejar el asunto en manos de los intereses del deporte. A Wolff no le gustó nada la intervención desde fuera de su jurisdicción como jefe de equipo.
Hasta ese momento Red Bull asumió que lucharían codo a codo con Wolff por la transparencia en torno al acuerdo FIA-Ferrari. «Wolff fue el iniciador de esta carta. Nos sorprendió mucho que de repente llegara esta retirada», declaró Helmut Marko a Motorsport-total.com
Ahora mismo esto son sólo rumores y nadie sabe dónde va a terminar. No es la primera vez que la Marca de la Estrella se junta con los británicos, ya que estos últimos también colaboraron con Aston Martin en el DTM, mediante la estructura de HWA.
