El holandés explica por qué cree que Lewis Hamilton fue inalcanzable el domingo en Estiria. y cómo parecía que estaba controlando la diferencia en todo momento
Casi 34 segundos son los que separaron a Lewis y Verstappen a la finalización de la carrera del pasado domingo. Una ventaja relativamente grande, debida a la parada en boxes «extra» de Max, con el objetivo de conseguir la vuelta rápida. Pero, ¿podría haber conseguido algo Max, el pupilo de Red Bull, el pasado domingo en Spielberg?
Max hizo autocrítica tras la carrera, declarando: «Fue lo máximo que podía conseguir, puesto que la velocidad de Mercedes era claramente superior. En cambio, nosotros fuimos demasiado lentos. Aunque hubiéramos cambiado nuestra táctica, el resultado final no hubiera variado. Parar antes, después o en la misma vuelta, no nos hubiese servido de nada.»
Durante la carrera, el propio Max se lo hizo saber a su equipo, expresando con resignación que le dejaran ir aún siendo los tiempos por vuelta fluctuantes. «Lewis estuvo controlando su ritmo durante toda la carrera. El sabía en todo momento en qué tiempos me encontraba yo, y lo tenía bajo control. Básicamente, si yo hubiera empujado más, él hubiera hecho lo propio para que no pudiera alcanzarle.»
Además Verstappen añadió que los neumáticos no fueron la causa tampoco. El comportamiento del RB16 no cambió mucho en su stint de carrera. «Sólo he sufrido durante las últimas 10 vueltas con los neumáticos; todo lo demás se puede interpretar como dominio de Mercedes».
Analizando la carrera, se puede ver que Verstappen mantuvo una distancia con Hamilton de unos 5 segundos hasta la vuelta 50. A partir de esta vuelta, el holandés fue perdiendo tiempo respecto a Lewis, lo que conllevó a la aproximación de Bottas. Éste logró pasar a Verstappen en la vuelta 66, evitando cualquier posibilidad de romper un posible doblete de las fechas de plata.
