Sin carreras, no hay ingresos: Los equipos de F1 pronto tendrán poco dinero saliendo de las arcas de los promotores de la competición. Esto podría poner a algunos equipos de carreras en una situación desesperada. El aplazamiento de las nuevas regulaciones hasta 2022 ha sido discutido desde hace mucho tiempo.
La crisis de coronavirus es también una crisis financiera. En todo el mundo, los precios de las acciones están en caída libre. Las acciones de Fórmula 1 de Liberty no son una excepción. Cayó de 46 dólares (40,80 euros) el 20 de febrero a un mínimo de 18,30 dólares (16,60 euros) el 17 de marzo en sólo 27 días. La razón es obvia: sin carreras, no hay dinero.
La cuota de inscripción para el Gran Premio de Australia, Bahrein, Vietnam y China habría aportado un total de unos 150 millones de dólares. Ahora hay un cero ahí. Aparentemente el siguiente trato se ha hecho con la AGPC en Australia. Cada parte se deja a su propia suerte. Los australianos en su organización y costos de montaje, la Fórmula 1 en la cuota de entrada perdida.
También de Bahrein, Vietnam y China el dinero sólo fluirá cuando las carreras se lleven a cabo. Por lo tanto, ninguno de los Grandes Premios es oficialmente cancelado, sólo pospuesto. Con la esperanza de ser capaz de parchearlo en el calendario algún tiempo después.
Liberty también tiene que aceptar pérdidas en sus contratos de televisión. Dependiendo del equipo, las estaciones de televisión obtienen descuentos si no hay carreras que transmitir. Esto perjudica a los titulares de los derechos, especialmente con Sky England, el mayor contribuyente neto. Sin carreras, tampoco hay ingresos del Paddock Club y de los patrocinadores del evento.
Sin carreras, los equipos de Fórmula 1 siguen teniendo costes, pero con ingresos significativamente reducidos. Liberty tiene que corregir la distribución
Son muy malas noticias para los equipos. Sólo reciben dinero de Liberty de marzo a diciembre. Cerca del 67 por ciento de los ingresos totales se distribuyen. Comienza en marzo con el acuerdo final del año anterior. Si la estimación de los ingresos anuales de Liberty es demasiado alta, la cuota final será menor, de lo contrario se harán pagos adicionales.
Durante la temporada, se hace un pago por adelantado cada mes de acuerdo con la clave de distribución de 2019, pero sobre la base de los ingresos estimados para 2020. Y Liberty está teniendo que ajustar esto dramáticamente hacia abajo. Amargo para los equipos: Incluso los patrocinadores de su propio equipo sólo pagan por los eventos de los Grandes Premios que tienen lugar.
Los equipos se ven afectados por la falta de ingresos. Sus costos continúan corriendo como de costumbre. No importa si tienes 240 empleados como Haas o 1.000 como Mercedes. Los equipos pequeños podrían encontrarse pronto en una situación desesperada si sólo se pagan pequeñas cantidades en los próximos tres o cuatro meses.
Los grandes equipos ya no son rentables. Esto es especialmente importante en tiempos en que los propios fabricantes de automóviles están bajo presión en el mercado del automóvil. Mercedes y Renault esperan que sus equipos de Fórmula 1 al menos no cuesten dinero.
¿La Fórmula 1 volverá a conducir los coches en 2021 según las antiguas normas?
El 90 por ciento de los equipos a favor de posponer la reforma hasta el 2022
Cuanto más tiempo dure el proceso de incertidumbre, peor será. El programa en los departamentos técnicos está funcionando actualmente a potencia reducida de todos modos, porque no se pueden probar las actualizaciones previstas en la pista. Por lo tanto, cada paso de desarrollo ulterior está sujeto al riesgo de que se cree sobre una base errónea.
En una conferencia telefónica con el jefe de la Fórmula 1, Chase Carey, nueve de cada diez equipos han acordado homologar el chasis, la transmisión y las piezas de la suspensión del 2020 para finales del 2021. Sólo el desarrollo de la aerodinámica estaría exento. Esto le ahorraría a los equipos mucho dinero.
En la encuesta sólo Ferrari no estaba de acuerdo. Los italianos pidieron tiempo para pensarlo. Debido a la dramática situación de la corona en el país, Ferrari está actualmente bajo una enorme presión. Nadie sabe cuánto tiempo tendrá que permanecer cerrada la fábrica, a pesar de las vacaciones de verano. Una cosa es segura: Ferrari también perderá mucho dinero.
Es posible que ya se tome una decisión en otra conferencia telefónica el jueves. Y podría verse así: Para salvar a los equipos de la bancarrota, la temporada 2021 se conduciría con los autos 2020 y las nuevas regulaciones se pospondrían un año hasta el 2022.
Esto ahorraría a los equipos tener que construir nuevos coches durante una temporada y les permitiría concentrarse plenamente en el desarrollo aerodinámico. Y tendrían más tiempo para prepararse para la gran reforma de las reglas, que no entraría en vigor hasta el 2022. Cuando se le preguntó, el jefe del equipo de Racing Point, Otmar Szafnauer, respondió: «En vista de la dramática situación no hay otra opción.
Esta solución también nos daría más flexibilidad para reorganizar el calendario. Si la temporada no comienza en Bakú como se esperaba, sino más tarde, la temporada del 2020 podría durar hasta enero de 2021. Las razas canceladas en el hemisferio sur podrían estar llenas hasta el invierno. En abril de 2021 la nueva temporada continuaría.
¿Se reducirá el tope del presupuesto de nuevo para aliviar a los equipos pequeños? La oportunidad de reducir el tope del presupuesto
El aplazamiento de los reglamentos técnicos no debería afectar al límite máximo del presupuesto. Sin embargo, el límite de gasto debería llegar ya el próximo año.
De hecho, debe hacerlo. Podría ser la oportunidad de oro para la FIA y los titulares de los derechos para convencer a los equipos de que reduzcan drásticamente el tope del costo, que actualmente es de 175 millones de dólares, junto con sus muchas excepciones.
Un jefe de equipo del campo de los equipos pequeños dice: «Ahora los grandes también tienen que renunciar finalmente a su arrogancia. …porque ellos mismos están bajo presión».
