El jefe de Red Bull ha calmado a los aficionados de Red Bull a pesar de la buena sesión en el primer día de test
Max Verstappen ha disfrutado de un buen primer día de test en Baréin, donde en la sesión matinal mostró un gran ritmo y por la tarde, a pesar del viento y el polvo, que les impidió dar muchas vueltas, consiguió marcar la mejor vuelta.
A pesar de este pequeño éxito en el día de hoy, el jefe de Red Bull, Christian Horner no se quiere confiar y no quiere calificar esta temporada como la mejor del equipo ni lanzar las campanas al vuelo sobre ganar el campeonato ya que mucho dependerá de Mercedes.
«Eso depende mucho de lo que haga Mercedes. Han sido la referencia durante años y seguirán siéndolo. No ha sido fácil para nadie, aunque creo que el equipo lo ha manejado bien. Sin embargo, no nos hacemos ilusiones: Mercedes es el favorito», comentó Horner en rueda de prensa.
Max Verstappen tuvo un primer trompo, algo que fue habitual con el RB16 el año pasado. Sin embargo, esta circunstancia no preocupó al jefe de Red Bull ya que como comenta Horner y era visible, el viento estaba jugando un papel fundamental.
«Creo que fue debido al viento. Max, por supuesto, indicó algunos puntos para afinar, pero nada fundamental», comentó Christian Horner.
Cabe destacar que la sesión del viernes por la tarde ha sido muy difícil para los equipos y pilotos debido a la cantidad de polvo y viento que llegó al circuito, lo que dificultaba el agarre en la pista.
