Ferrari ha cerrado su fábrica de Maranello, incluyendo la parte correspodiente a la Fórmula 1.
Siendo Italia el país europeo más afectado por el brote de COVID-19, el gobierno italiano ha impuesto un estricto bloqueo en todo el país para tratar de limitar la transmisión de virus entre la comunidad.
Mientras que a algunas empresas se les permitió seguir operando, Ferrari ha encontrado que su división de automóviles de carretera no puede mantener la producción debido a problemas en la cadena de suministro.
En una declaración emitida por el fabricante italiano, dijo que la producción en Maranello y Módena cesaría inmediatamente hasta el 27 de marzo, y que el equipo de F1 también suspendería sus actividades. El personal, sin embargo, podrá seguir trabajando a distancia desde su casa, también llamado teletrabajo, como se esta empezando a fomentar en España.
El director general de Ferrari, Louis Camilleri, dijo: «En un momento como éste mi gratitud va ante todo a las mujeres y hombres de Ferrari que, con su tremendo compromiso en los últimos días, han demostrado la pasión y la dedicación que define nuestra marca.»
«Junto con nuestros proveedores, han asegurado la producción de la empresa. Y es por nuestro respeto hacia ellos, por su tranquilidad y la de sus familias que hemos decidido este curso de acción.»
«Nuestros clientes y fans también están en nuestra mente y son la prioridad para nosotros en este momento, mientras nos preparamos para un fuerte reinicio.»
Como un miembro del equipo McLaren ha contraído el coronavirus antes del Gran Premio de Australia, se entiende que varios equipos ordenaron al personal que estaba presente en Melbourne que se mantuviera alejado de las fábricas durante al menos 14 días para asegurarse de que no lo han recogido.
