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Creo que el domingo a muchos nos vino a la mente aquella frase “los fierros no tienen palabra de honor” y en este tan esperado inicio de temporada a Red Bull le ha tocado sentir en carne propia cuánta verdad encierran estas palabras.

En ninguno de los escenarios que me pasaron por la mente imaginé lo que ya todos vimos. Sea como sea, creo que esta primera carrera no deja a nadie indiferente. Felicidad para algunos y tristeza para otros, siempre es y será así, pero tal vez la forma en la que todo sucedió deja ese sentimiento más a flor de piel. Es cierto, apenas comenzamos. Muchas cosas deberán ajustarse y conforme avance la temporada evolucionarán; surgirán y se resolverán todo un sinfín de problemas y desafíos. Más ahora, cuando hay muchísimo por aprender sobre las nuevas características de los autos, de los neumáticos, los cambios en la reglamentación… Borrón y cuenta nueva.

Aunque ahora mismo sigo con las emociones encontradas y mi cabeza no deja de revivir lo sucedido, algo me queda claro. Si la temporada pasada fue emocionante, ésta no se va a quedar atrás y ya pudimos ver los primeros destellos. Ese maravilloso duelo por el liderato que nos regalaron Leclerc y Verstappen, en el que intercambiaron posiciones tantas veces que perdí la cuenta, fue un momento que realmente disfruté. Una media tabla muy movida y con sorpresas que nos permiten soñar con una temporada mucho más competitiva para varios equipos, algo que como espectadores siempre agradeceremos. Algunos mejorando substancialmente como Haas y otros luchando con las nuevas políticas de diseño como McLaren. Por otro lado, si bien es cierto que no vi a un Mercedes tan seguro y que este tercero y cuarto lugares fueron más por los problemas de Red Bull que por méritos propios, sin olvidar el safety car que vino a agruparlos de nuevo, sería agradable ver no a dos, sino a tres equipos disputándose los primeros lugares carrera con carrera y a las demás escuderías empujando fuerte y dando una que otra sorpresa. Y si seguimos soñando, ver a más de dos pilotos en la lucha por el campeonato. ¿Se imaginan una temporada así?

Esta primera carrera nos deja mucha tela de dónde cortar y resultados que vale la pena resaltar. Imposible hablar de todo, mencionaré solo a tres equipos. Alfa Romeo terminó el fin de semana con nueve puntos, una fantástica cosecha para ellos. Así es, Guanyu Zhou inició con el pie derecho logrando meterse al décimo puesto, lo que le dio su primer punto. Primera carrera de Formula 1, primer punto, nada mal. Un poco más adelante y también en un gran debut con su recién estrenada escudería, Valtteri Bottas terminó en la sexta posición. He llegado a pensar que este sexto lugar le trajo incluso mejores sensaciones que muchos de sus anteriores podios y no olvidemos que empezó la carrera justo al lado de su antiguo coequipero, seguramente un buen fin de semana para él. Y si hablamos de grandes sorpresas tenemos, por supuesto, a Haas. Después de una excelente clasificación, Magnussen logró cuajar un gran resultado colándose hasta la quinta posición y enviando diez puntitos directo a la bolsa de Steiner que debe estar más que feliz y con una sonrisa que no le van a quitar de la cara en muchos días. Y Schumacher, si bien no llegó a la zona de puntos, se quedó a nada y ese onceavo lugar también es motivo de festejo. Es cierto que el abandono de Red Bull ayudó un poco, pero la felicidad nadie se las quita. Y qué bien, resulta refrescante este inicio para dos equipos a quienes ya nos habíamos acostumbrado a ver mucho mucho más atrás. Del otro lado de la moneda, creo que la gran decepción fue McLaren. Si bien ya lo veíamos venir, el domingo, simplemente, no lograron encontrarse.

Pues sí, el Cavallino Rampante está de regreso. Un fin de semana redondito para Ferrari y un doble podio bien merecido. Un buen auto y dos jóvenes y aguerridos pilotos, Sainz y Leclerc, parecen ser la receta perfecta para lograr grandes cosas este año. Los tifosi deben estar felices después de todo lo que han esperado este momento. Ya veremos cómo evoluciona su temporada, por ahora este fue verdaderamente un inicio de ensueño. Sobre Mercedes, no creo que este resultado refleje su verdadero nivel y si bien no parecen tan fuertes, al menos no como nos tienen acostumbrados, van a mejorar, al menos así lo creo. Ya veremos si pueden ser protagonistas en la lucha por los campeonatos. En cuanto a Red Bull, fue sencillamente un día frustrante, perdieron todo a escasas vueltas del final. Tienen una larga semana frente a ellos, o al menos así se dice porque en realidad creo que se les hará cortísima. El domingo, tanto Max como Checo hicieron una gran carrera. Ver el abandono de Max y luego a Checo seguir el mismo camino, justo cuando estaba regalándonos otra gran defensa ante Hamilton, fue un trago amargo de pasar. Un par de vueltas antes del final sintió que perdía potencia y luego, en la primera curva de la última vuelta, ¡la última vuelta! el motor sencillamente se apagó y sus neumáticos se bloquearon. No había nada que pudiera hacer. Los problemas de Alpha Tauri seguramente despertaron las alarmas de su hermano mayor y por desgracia momentos más tarde todo se vino abajo. Lo que me tranquiliza fue haber visto a un Red Bull fuerte desde el inicio del fin de semana. Tienen trabajo, sí, pero creo que el próximo domingo la historia será diferente. Muy pronto lo sabremos. “Siempre que llovió, paró”, diría un buen amigo argentino.

Y así iniciamos una de las temporadas más esperadas de la Fórmula 1 en muchos años. Salimos de esta primera cita con una tabla de posiciones que más pareciera sacada de alguna película surrealista que de un pronóstico objetivo. Pero, es la primera, y si algo he aprendido viendo este maravilloso deporte es que no debemos dar nada por sentado. Ya lo dijo Fangio, “para ganar, lo primero que hay que hacer es llegar”. Ya veremos quién puede mantenerse, quién entra en la pelea, quién sale y quién, finalmente, llegará. Queda mucho camino por delante.

Lo importante es que ya iniciamos, ya vivimos la primera carrera de 2022 y al parecer se viene una temporada de locos, todo moviéndose al ritmo de la nueva reglamentación, que seguramente nos dejará alguna que otra polémica. Ese día que veíamos tan lejano llegó y no solo llegó, sino que ya tenemos los ojos puestos en Jeddah, en el Gran Premio de Arabia Saudita. La segunda cita de la temporada está a tan solo unos días.

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