Los chicos del Mini #300 se mostraron algo decepcionados tras su llegada al vivac, ya que cedieron unos valiosos minutos en la segunda etapa
A igual que el año pasado, el Dakar en Arabia está siendo cuanto menos complicado para todos los participantes. No solo el terreno roto les pone en aprietos con posibles pinchazos, sino que además la navegación se antoja cuanto menos difícil con el paso de los kilómetros.
A diferencia de ayer, Carlos al igual que Lucas han sufrido en el día de hoy, ya que tras varias perdidas han perdido el liderato frente a Peterhansel y +09:17 con Nasser Al-Attiyah.
«No ha sido fácil… Tuvimos un problema con un punto de control y perdimos unos cinco minutos, pero es lo que hay, un día va bien y el otro no es tan fácil», explicaba Sainz.
La ausencia de tiempo para preparar el roadbook les esta poniendo en aprietos, ya que salen día tras día a una aventura completamente nueva.
«Es lo que ocurre ahora en los raids, que la navegación es difícil en algunos puntos, pero es lo que hace que también haya alternativas».
El madrileño quiere quitar hierro al asunto y parte una lanza a favor de su buen amigo y copiloto Lucas Cruz.
«Hay mucha tensión, pero hay que entender que la labor del copiloto no es fácil. Lo importante es que otro día más estamos aquí».
El francés Stéphane Peterhansel se convierte en el nuevo líder tras el día de hoy, aventajado así en +06.37 respecto al segundo clasificado, Carlos Sainz.
«Al principio fue difícil encontrar el ritmo con tanta duna, pero luego la navegación fue más decisiva y mi copiloto hizo un gran trabajo. Quizá perdimos un minuto encontrando un ‘waypoint’, pero eso no es nada. Carlos abrió pista 250 km, le adelantamos y los últimos 200 abrimos nosotros. Salir segundo nos viene bien para mañana porque le tocará abrir pista a Nasser. Es un buen comienzo».
