El piloto español explicó cómo fue la carrera en los diferentes stints, así como el momento en el que decidieron poner los intermedios, clave para acabar en el podio
El Gran Premio de Rusia fue un torbellino de emociones para Carlos Sainz, que pudo saborear el dulce sabor del vino espumoso en el podio vestido de rojo por tercera vez esta temporada, aunque en una de ellas fue tras la ceremonia, como le ocurrió en Brasil 2019.
La salida fulgurante que le puso en cabeza, la decepción por la facilidad con la que Norris le adelantó en las primeras vueltas debido al graining, el podio perdido luchando con un Pérez con gomas más nuevas y finalmente la lluvia con el final al ver la bandera a cuadros en tercera posición.
Una gran alegría para el piloto español, que en su análisis posterior a la carrera no deja de analizar con claridad los puntos críticos en los que seguir trabajando junto al equipo.
«Estábamos relativamente tranquilos. Íbamos terceros y veía que podíamos estar por delante de Pérez hasta el final de la carrera. Teníamos el neumático duro, pero tenía un buen equilibrio y un buen ritmo», comenzó Sainz.
«A falta de cinco vueltas empezó a llover mucho en el primer y segundo sector y todos los que llevaban neumáticos duros, como Lando, Lewis y yo, perdimos mucho agarre. En cambio, todos los que iban en medio lograron mantener más temperatura y agarre y empezaron a adelantar».
«A partir de ahí, hemos hecho la llamada perfecta para entrar en boxes y hemos vuelto a quedar terceros. Estoy contento, pero la próxima vez que sea primero no me gustaría que me pasaran tan fácilmente».
No podía dejar de reflexionar sobre su salida, en la que intentó por todos los medios ponerse en cabeza a la salida de la primera curva y lo consiguió:
«Estaba muy apretado. Hice una buena salida, pero todos los que estaban por fuera mejoraron con un poco más de agarre. Pude mantenerme al lado de Russell para entrar en el rebufo de Norris».
«Luchamos rueda a rueda con George hasta que fui yo el que mantuvo el rebufo. Lo alcancé y pensé ‘es ahora o nunca'».
«No sé cuándo volveré a tener esa oportunidad. Hoy quería ser agresivo y arriesgar en la salida, y salió bien», concluyó Sainz.
