El equipo alemán volvió a la acción el martes al correr con un monoplaza de 2018 en Silverstone.
El objetivo principal de estos test es probar los nuevos protocolos de COVID-19 para el inicio del campeonato mundial en Austria el mes que viene, pero el funcionamiento de la pista también da a los pilotos y al equipo la oportunidad de volver a la velocidad después de la pausa forzada. Bottas fue el primero y hoy es el turno de Lewis Hamilton
La prueba está permitida por las reglas de la FIA, ya que el equipo utiliza un coche de 2018, que tiene que estar con las especificaciones de su correspondiente temporada sin que se pruebe ninguna de las piezas actuales. El equipo también tiene que usar los neumáticos de prueba proporcionados por Pirelli, en lugar de los compuestos de carreras de 2020.
El jefe del equipo, Toto Wolff, admitió que reiniciar la temporada a puerta cerrada, y con un calendario muy apretado, será un reto para los equipos.
«Al menos sabemos que volveremos a competir en los próximos meses», dijo Wolff a Sky F1. «Es un sólido calendario europeo, y todo el mundo en Brackley y Brixworth está feliz de que finalmente podamos volver a la pista. Nos encanta la competición, y nos lo perdimos».
«Es un desafío. Todos sabemos por qué, pero creo que le debemos a nuestros fans darles una carrera y hacer un buen espectáculo. Por supuesto que será pesado para todos nosotros, hacer tres carreras en tres semanas, no poder volver a casa, pero son estas circunstancias especiales.»
Wolff dijo que era imposible predecir cómo ha cambiado el equilibrio competitivo entre los equipos desde los test de invierno.
«El tiempo es muy limitado para trabajar en los coches, apenas hemos tenido cinco semanas en las que podemos hacer algo. Por supuesto, trataremos de mejorar. Tal vez traer una mejora que habría sido planeada de todos modos para esa época del año».
«Va a ser más una experiencia de prueba en vivo, en lugar de correr en carreras anteriores, en sesiones de práctica libres. Así que muy emocionante, muy nuevo. Un gran desafío para todos en muy poco tiempo, y que gane el mejor».
Wolff dice que él personalmente está más motivado de lo que estaba en el inicio de la temporada originalmente programado.
«Cuando fuimos a competir a Australia no lo esperaba, porque tuve seis temporadas tan intensas luchando por los campeonatos mundiales, que el agotamiento mental seguía ahí».
«Cuando se canceló, obviamente no sabíamos lo que había pasado, y estoy muy contento ahora, porque hemos estado hambrientos de F1 y estoy muy ansioso por volver a competir».
«En cierto modo, lamentablemente no habrá muchos aficionados, y no muchos medios de comunicación, pero se ha reducido a lo que más me gusta, y eso es la competición.»
