En el mercado de pilotos de 2020, los de Borgo Panigale decidieron modificar toda su alineación, pues hace una gran apuesta de futuro con seis pilotos jóvenes
La salida de Andrea Dovizioso de Ducati después de ocho años, y la de Danilo Petrucci tras siete temporadas con los de Borgo Panigale, provoca que los italianos tengan que hacer una apuesta fuerte por un cambio de generación, ya que llegarón tres rookies a las manos de Ducati, como a su vez, la promoción de tres conocidos, Jack Miller, Francesco ‘Pecco’ Bagnaia y Johann Zarco.
«Mi respuesta sólo puede ser afirmativa. Aunque no fue una decisión fácil, la tomamos porque creíamos que era el momento de hacer un cambio importante. Sin rechazar nada de lo que hicimos con Andrea y Danilo, por diversas razones, era necesario un cambio radical y creo que nuestra política de insertar energía fresca con pilotos jóvenes en todos los equipos es correcta. Era el momento de pensar en el futuro con algunos pilotos que todavía tienen perspectivas de mejora».
A pesar de no haber acabo de las mejor manera su largo matrimonio, Paolo Ciabatti agradece todo lo que ofreció Andrea Dovizioso en sus últimas ocho temporadas en la categoría reina. Pues desde 2013, esté, estaba en el equipo de fábrica.
«Obviamente Andrea fue muy importante para Ducati, ganó 14 carreras con nosotros, después de Casey Stoner, que es el piloto más exitoso con nuestra moto. Desde este punto de vista ha hecho una contribución muy importante, pero también es cierto que Miller está en su cuarta temporada en Ducati y conoce muy bien el método de trabajo, como Pecco, en su tercera temporada con nosotros. Creo que no habrá carencias ni contraindicaciones respecto al pasado».
Tras los resultados de los test de pretemporada, todo apunta a que Ducati hizo una apuesta arriesgada, aunque correcta, pues todos sus pilotos rindieron como se esperaba. Incluso algunos como el caso de Jack Miller, Jorge Martín o Johann Zarco rindieron a un ritmo más alto de lo inicialmente previsto por Ducati.
El rendimiento de Jorge Martín fue el más sorprendente para los de Borgo Panigale, pues su adaptación fue bastante rápida, a pesar de las múltiples caídas. Sin embargo, los otros dos italianos, Luca Marini y Enea Bastianini sufrieron como se esperaba, pero su progresión fue hacia arriba con el paso de los días.
«Todo fue muy bien. No tuvieron la oportunidad de subirse a una moto de MotoGP hasta Qatar, lo que es bastante inusual porque normalmente se habrían hecho test en Valencia, Jerez y Sepang que se cancelaron y todo se compactó en seis días. Los tres lo han hecho muy bien, son pilotos con características diferentes, Luca, debido a su físico delgado, ha necesitado más tiempo para encontrar una ergonomía adecuada a su altura y estar cómodo sobre la moto, Enea y Jorge, al ser más pequeños, han tenido menos problemas».
Además, Ciabatti no solo quiso escuchar las impresiones de los recién llegados a la categoría, pues tomó la decisión de escuchar las sensaciones de los ingenieros de los tres pilotos.
«He hablado con sus ingenieros, Romagnoli, Giribuola y Ferraccioli, y están muy satisfechos con su enfoque, las ganas de aprender, la rapidez con la que almacenan la información y el interés que muestran en el estudio de los datos. Es un gran comienzo, pero ya sabemos que cuando lleguemos a las diferentes pistas les será más difícil ajustar la moto, el trabajo podría ser más difícil. Sobre todo, esperamos un crecimiento continuo de ellos».
