El gobierno austriaco ha dicho que no se "interpondrá" en la carrera de Fórmula 1 en el Red Bull Ring que se celebrará a puerta cerrada a principios de julio.
Con el Gran Premio de Francia a punto de convertirse en el décimo gran premio de este año que se cancelará como resultado de la pandemia COVID-19, el Gran Premio de Austria – programado para el 5 de julio – se celebra actualmente como la ronda de apertura de la temporada 2020.
Los jefes de la F1 están trabajando para intentar formar un nuevo calendario en medio de la pandemia en curso, manteniendo la esperanza de seguir celebrando hasta 19 carreras si la temporada puede comenzar en julio.
El director general de la F1, Ross Brawn, dijo la semana pasada que es probable que la nueva campaña comience en Europa y se desarrolle a puerta cerrada, con estrictas limitaciones para garantizar la seguridad de los que trabajan en el paddock del evento.
En una conferencia de prensa el miércoles, el ministro de deportes austriaco y vicecanciller Werner Kogler dijo que el gobierno no se opondrá a que la carrera se lleve a cabo a puerta cerrada.
«No queremos interponernos en el camino», dijo Kogler.
«Esta es una situación completamente diferente a la de los partidos en un estadio. Varias personas están afectadas. Las reglas de distancia mínima tendrían que ser observadas de la misma manera, por supuesto. Pero eso parece posible.
«No quiero ocultar el hecho de que estoy en contacto con el gobernador de Estiria en este sentido. Esto estaría en el calendario existente en julio.
«En última instancia, las federaciones deportivas deben decidirlo por sí mismas. Y que también estuve en contacto con Helmut Marko, quien por su parte juega un papel correspondiente en Red Bull y ha actuado como mediador.
«Le dije que me gustaría honrar esto, que enviaremos todas las directrices aplicables a las asociaciones de automovilismo pertinentes como un servicio, para que puedan ver lo que es posible o no.»
Austria tiene actualmente unas directrices estrictas en cuanto a la entrada en el país, requiriendo a los que llegan a auto-aislarse o probar mediante certificados de salud que no son portadores del coronavirus.
Kogler dijo que las pautas para entrar y salir del país serían el mayor desafío que la F1 tendría que superar para que el evento se desarrolle según lo previsto.
«[La Fórmula 1] es un convoy internacional en el mejor sentido de la palabra. Eso debe ser considerado dentro del marco de las restricciones existentes de entrada y salida», dijo Kogler.
«No quiero anticipar la necesidad de una exención aquí o allá. Es sólo en principio que esto estará vinculado al aislamiento o a los certificados de salud, que sé que ahora también son posibles.
«En principio, la propia Fórmula 1 me ha dicho que, desde su punto de vista, esto podría funcionar. Incluso si uno u otro se aísla primero.
«Pero no quiero interferir en eso, sólo quiero saber que las regulaciones existentes se están aplicando. Lo que es importante para nosotros es que las regulaciones de distancia deben aplicarse.
«Y en algún momento, por supuesto, también será una cuestión de las personas en este convoy, porque decenas de miles son menos favorables que miles, creo, porque con cada número aumenta la probabilidad de que algo suceda de todos modos.»
El gobierno austriaco comenzó a aliviar el cierre nacional el martes, permitiendo la reapertura de algunas tiendas más, pero aún así está aplicando estrictas reglas de distanciamiento social.
